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"TRÁFICO DE MENORES"

"Consignan a 16 por compra-venta de niños en DIF-Sonora"

"Desde el 2012 se habían realizado esas operaciones, en las que los funcionarios llegaron a recibir hasta 150 mil pesos"
16/11/2015 11:27

    HERMOSILLO (UNIV)._ La Procuraduría General de Justicia del Estado, ha consignado a 16 personas por su probable participación en la presunta comisión de los delitos de suposición, supresión, ocultación y sustitución de padres, así como por la sustracción y tráfico de menores.

    Hasta el momento sólo se han girado dos órdenes de aprehensión: una en contra del ex subprocurador de la Defensa del Menor y encargado de la Línea Protege, Vladimir Alfredo Arzate Carbajal, y otra en contra del abogado de la Unión Ganadera de Sonora, José Manuel Hernández López, quienes no han sido detenidos.

    Carlos Navarro Sugich, Procurador del Estado, informó que hasta el momento se ha logrado identificar a 9 menores que fueron anotados de manera irregular ante el Registro Civil de Sonora, cuyos padres pagaron montos que oscilan entre los 80 mil hasta los 150 mil pesos y otros 15 mil pesos por el aviso de nacimiento.

    Detalló que el 18 de marzo se recibió una denuncia anónima sobre las irregularidades en el proceso de adopción de los niños, y fue hasta ayer cuando se giraron las órdenes de aprehensión en contra de dos de los presuntos involucrados.

    De acuerdo con las investigaciones, desde el 2012 los implicados encontraron la manera de obtener un beneficio económico a cambio de entregar a niños a personas que tenían el deseo de adoptar un menor y los presentaron ante el Registro Civil como hijos biológicos.

    Hizo un llamado a las mujeres con "transitoria vulnerabilidad" –con problemas de adicciones o jornaleras agrícolas- que entregaron a sus hijos, para que se acerquen a la Procuraduría para reclamar a sus hijos, puesto que se desconoce quiénes son porque los menores no llevan sus apellidos.

    El tráfico de menores se venía realizando desde 2012 y se ha comprobado en 9 casos registrados en los municipios de Nogales y Hermosillo, refirió.

    A los padres adoptivos involucrados también se les seguirá proceso penal, advirtió el fiscal sonorense.

    Vladimir Arzate Carbajal, de 30 años, tiene cargos por incumplimiento de un deber legal con una condena que puede alcanzar de uno a seis años de prisión e inhabilitación, por los delitos de suposición, supresión, ocultación y sustitución de padres puede alcanzar una pena de seis meses a seis años de cárcel y por sustracción y tráfico de menores de 15 a 40 años de prisión.

    En las listas de acuerdos en los juzgados de Distrito federales en Hermosillo, consta que Vladimir Arzate Carbajal promovió un amparo con fecha 15 de mayo en contra del Agente del Ministerio Público especializado en Querellas y fue concedido.

     

    "Se procederá contra quienes compraron niños"

    El Procurador General de Sonora, Carlos Navarro Sugich, aseguró que sería "muy triste" cualquier omisión en el caso de las 14 personas que ante la autoridad admitieron haber comprado alguno de los nueve menores que hasta el momento se sospecha fueron sustraídos de un hospital del estado, aun cuando estos padres adoptivos han dado un buen trato a los infantes.

    En entrevista en el espacio de José Cárdenas en Radio Fórmula, el funcionario estatal dijo que en este caso "tiramos la pirinola y todos perdimos", porque pierden los menores, las madres que en situación de vulnerabilidad fueron convencidas de entregar a los niños y niñas y no tuvieron la oportunidad de arrepentirse.

    "Es un asunto una pesadilla, porque estos papás hicieron un trabajo magnífico. No les ha faltado amor, no les ha faltado nada a los niños. Sin embargo, los propios jefes de familia cuando fueron a declarar admitieron sin excepción que ellos habían entregado dinero y habían presentado (a los niños) como hijos biológicos".

    El Procurador Estatal pidió ver este caso como una advertencia para los padres de familia, para que chequen los procedimientos de adopción cuando así suceda y no relajar los criterios cegados por el deseo de tener un niño en el seno de un hogar.