Año complicado para los mercados financieros

    Si bien la Fed espera que las presiones inflacionarias se disipen a lo largo del año considerando la normalización en las cadenas de suministro y por el retiro de estímulos fiscales y monetarios, el banco central prefiere tener alternativas para actuar de inmediato en caso de que la inflación continúe subiendo. Powell reiteró que la meta principal de la Fed es mantener la inflación anclada alrededor de 2 por ciento”

    Los mercados financieros globales han tenido un inicio de año lento y difícil, debido a que las autoridades monetarias en USA han optado por un lenguaje más agresivo ante la perspectiva de que la inflación se mantendrá elevada por algún tiempo. En la semana, la Reserva Federal (Fed) en USA, anunció que mantuvo sin cambios su tasa de interés de referencia (en 0.25%), que mantendrá el retiro de estímulos económicos en marzo y aclaró, que si va a subir las tasas de interés nuevamente en su próxima reunión este próximo marzo. Jerome Powell comentó que la mayor preocupación del banco central en este momento es la inflación, por lo que dejó abierta la puerta para subir las tasas a un ritmo más rápido de lo que el mercado originalmente estimaba. Si bien la Fed espera que las presiones inflacionarias se disipen a lo largo del año considerando la normalización en las cadenas de suministro y por el retiro de estímulos fiscales y monetarios, el banco central prefiere tener alternativas para actuar de inmediato en caso de que la inflación continúe subiendo. Powell reiteró que la meta principal de la Fed es mantener la inflación anclada alrededor de 2 por ciento.

    La inflación promedio en USA observada en los últimos cinco años ha sido muy cercana al 2 por ciento (2.4 por ciento), mientras que en los últimos 10 años la inflación observada es de 1.8 por ciento. En lo que va del año, la tasa del Treasury Bond a dos años, el tramo más sensible a los cambios de política monetaria avanzó 18 puntos base para llegar a 0.92 por ciento, su mayor nivel desde finales de febrero de 2020. Mientras que el Bono a 10 años subió 0.27 a 1.78 por ciento, una tasa no vista desde enero de 2020. La prioridad de la FED ya no es el empleo, sino la inflación, y para luchar contra ésta, tendrá que ajustar las tasas de interés al alza, De enero a diciembre de 2021, la inflación en Estados Unidos llegó a 5.7 por ciento, su mayor tasa anual en cuatro décadas.

    Lo anterior traerá como consecuencia que la mayoría de las alternativas de inversión de renta fija, tanto en pesos como en dólares pagarán este año tasas de interés reales negativas (restando la inflación) en México los Cetes pagan una tasa de 5,5 ´por ciento vs inflación estimada de 7.5 por ciento anual. En USA los Bonos del Tesoro a pagan una tasa de 0.25 por ciento vs inflación del 5.7 por ciento en el año. Ante este panorama la alternativa para los inversionistas es diversificar su portafolio de inversión patrimonial en alternativas que lo ayuden a promediar tasas positivas y puedan hacer crecer el patrimonio. La alternativa más recomendable es invertir una parte del portafolio en renta variable (acciones). De acuerdo con su perfil de riesgo, el porcentaje que recomendamos pudiera ser del 20 al 50 por ciento del portafolio de inversión. Porque la expectativa de estos mercados es que tengan rendimientos en el año de dos dígitos en base a los buenos resultados de las empresas listadas en las diferentes bolsas de valores como el S&P 500, NASDAQ y Dow Jones.

    La recomendación sería invertir en Sociedades de Inversión, ETF’s o acciones en directo que participen en los mercados extranjeros anteriores y en actividades como; Financieras y Bancos, productores de energía (Petróleo, Gas, electricidad) y Índices de mercados emergentes (China, Asia) como el MSCI Emerging Markets. Las acciones ofrecen la mejor oportunidad para superar la inflación y las acciones de los giros anteriores son las que cuentan con la mayor posibilidad de subir su precio este año. Estas empresas generalmente van al alza, cuando la economía va bien o se recupera de una crisis. El dinero cuesta mucho ganarlo, hay que invertirlo bien.