"Vuelve 'No seré feliz...'"

CULIACÁN._ A principios de los años 70, Sylvia Pasquel debutó en teatro de la mano de su padre, el señor Rafael Banquells, y fue una de las figuras más destacadas de la comedia musical y la escena teatral en el país. Y luego de numerosas telenovelas y películas, hacer el monólogo No seré feliz, pero tengo marido, es volver a su origen. 

"No seré feliz pero tengo marido es una obra excepcional, que conmueve, que lleva a la gente de la risa al llanto, es una obra que tiene mucha carnita, muchas cosas que podemos compartir con el público", díce la actriz, vía telefónica, desde la Ciudad de México. 

El monólogo, escrito por la dramaturga Viviana López Thorpe, cuenta la historia vida de Viviana, que luego 25 años de matrimonio feliz, la monotonía, el tedio y la falta de confianza ha llenado su vida y para no pasar a la estadística de "mujeres divorciadas", decide aguantar infidelidades y malos tratos. 

El éxito que la obra tuvo el año pasado que se presentó en esta ciudad, la hizo volver y se presentará el martes 27, en dos funciones, a las 19:00 y 21:15 horas, en el teatro Pablo de Villavicencio. 

"Definitivamente el éxito que ha tenido la obra desde mayo del año pasado en todas las ciudades me hace regresar a tantos lugares como Culiacán, que fue junto con Hermosillo, Ciudad Obregón, Nogales, Caborca, de las primeras giras que hicimos en el 2014 y desde ahí arrancamos con el pie derecho". 

En todos los lugares donde se han presentado, aseguró, han tenido teatro lleno, con público de pie, aplaudiendo.
"Y la gente saliendo para comprar boletos para la segunda función y traer a su familia, hijos, tía, papás". 

La razón, añade, es que la obra genera muchas emociones y sentimientos. 

"Pero sobre todo es que la gente sale inmensamente satisfecha, contenta, con la sonrisa en la boca , con un mensaje motivador, feliz". 

Pasquel recomendó acudir a ver la obra en pareja, no sola como mujer, porque aunque por el título pareciera una obra muy feminista, no es así. 

"Es la historia de Vivi y Jorgito, que son una pareja común y corriente, que se casan en 1987 porque ella está embarazada y cuando cumplen 25 años, el marido la deja porque se va con otra mujer", contó. 

"Toda esa primera parte es de risa loca, la gente ríe, es hilarante, una tras otra le van cayendo los 20, se está riendo, hasta llegar a esa escena conmovedora y tierna, que deja una enseñanza y reflexión final de la obra". 

Para quienes ya la vieron, informó, hay cosas nuevas, cambios en en Jorgito, el muñeco de tamaño natural que es el marido, en la vestimenta y algunos chistes nuevos. 

"La gente se la pasará muy bien, se divertirá mucho si no fuera así no estaríamos regresando a Culiacán". 

Y después de esta ciudad, llevará la obra a Ciudad Obregón, Tepic, Colima, Aguascalientes, San Luis Potosí, Torreón, Saltillo, Zacatecas, Monterrey, Querétaro, Xalapa y Guadalajara.

REPRESENTACIONES
No seré feliz pero tengo marido lleva 120 representaciones.