"Un año sin Gabo"
CULIACÁN._ Gabriel García Márquez partió un día como hoy del año pasado, era un Jueves Santo, dijo adiós el mismo día que Úrsula Iguarán, la matrona de la Familia Buendía, en su más grande novela Cien años de Soledad.
Se fue a los 87 años, por una infección pulmonar, en su casa de la Ciudad de México, país que el colombiano eligió para vivir, dejando como legado un universo literario que seguirá asombrando a miles de lectores por las siguientes generaciones.
Gabriel José de la Concordia García Márquez nació en Aracataca,el 6 de marzo de 1927, en una tarde de lluvia torrencial fuera de época, como describe en sus memorias Vivir para contarla.
Regaló al mundo una de las mejores novelas de la lengua española: Cien años de soledad, en la que narra la vida de siete generaciones de la familia Buendía, en el mágico pueblo de Macondo, determinante para los premios Rómulo Gallegos en 1972, y el Nobel de Literatura en 1982.
A ella se sumaron decenas de novelas, cuentos, reportajes, crónicas, artículos, discursos, guiones de cine, que lo hicieron uno de los autores más representativos del realismo mágico y del boom latinoamericano, junto con autores como Mario Vargas Llosa, Carlos Fuentes y Julio Cortázar.
Gabo fue el hijo mayor de Luisa Santiaga Márquez y Gabriel Eligio García. Estudió Derecho para complacer a su padre y al mismo tiempo inició su carrera como periodista y colaboró para El Universal de Cartagena, El Heraldo de Barranquilla y El Espectador.
A los 27 años publicó La hojarasca, su primer novela, y luego El coronel no tiene quien le escriba, inspirada en la historia de su abuelo.
En 1961 llegó a México y desde entonces alternó su residencia entre nuestro país y su natal Colombia.
Según las crónicas, en 1965 tuvo la revelación de lo que sería su gran obra, Cien años de soledad. Manejaba por la carretera de México-Acapulco y de pronto paró el auto para decirle a Mercedes, su esposa, que había encontrado el tono con el que escribiría su gran novela.
Luego reunió 5 mil dólares, se los dio, le avisó que se encerraría a escribir de tiempo completo, y le pidió que no lo molestara por ningún motivo y se ocupara de todo. Dieciocho meses después tenía Cien años de soledad concluida y una deuda de más de 10 mil dólares con el tendero.
Comprometido con los movimientos de izquierda, dejó Aracataca en 1937, poco antes de cumplir 10 años y regresó un año después de haber ganado el Nobel. El 30 de mayo de 2007 volvió al pueblo que lo recibió con una gran fiesta macondiana, que tuvo cobertura internacional.
En 1991 le diagnosticaron cáncer linfático y aún así, siguió escribiendo y cumpliendo proyectos, como el de crear la Fundación Nuevo Periodismo Iberoamericano, junto con el novelista argentino Tomás Eloy Martínez, para coadyuvar en la formación de cientos de periodistas a través de talleres, seminarios y conferencias.
En 2002 publicó sus memorias en el libro Vivir para contarla y dos años después su última novela, Memoria de mis putas tristes. En 2010 Grijalbo publicó Yo no vengo a decir un discurso, y la FNPI la antología de textos periodísticos Gabo periodista.
En 2013, la FNPI anunció la creación de un Premio Internacional de Periodismo con su nombre.
A un año de su partida, su nombre y su figura están más presentes y Sinaloa se sumará al homenaje que en el mundo se hará para recordarlo.
CELEBRARÁN A GABO
8:00 horas
El Club de Lectura La hojarasca y alumnos del CBTA 133 de Recoveco, harán una lectura ininterrumpida en voz alta de 'El coronel no tiene quien le escriba'.
9:00 a 17:00 horas.
Librería Educal, ubicada en el Casino de la Cultura, ofrecerá el 20 por ciento de descuento en los todos los libros de García Márquez que tengan en existencia.
GABRIEL GARCÍA MÁRQUEZ
Nació el 6 de marzo de 1927, en Aracataca, Colombia.
Sus padres fueron Luisa Santiaga Márquez y Gabriel Eligio García.
Fue reconocido con los premios Rómulo Gallegos en 1972, y el Nobel de Literatura en 1982.
A los 27 años publicó La hojarasca, su primer novela, y luego El coronel no tiene quien le escriba, inspirada en la historia de su abuelo.
En 1961 llegó a México y desde entonces alternó su residencia entre nuestro país y su natal Colombia.
Falleció el 17 de abril de 2014, en la Ciudad de México.
