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Saber Vivir

Un amor maduro

    El amor tiene mil maneras de manifestarse, se dice que no hay un momento perfecto ni un lugar preciso, y hablando de edades, se dice que, entre el amor adolescente y el amor adulto, no hay un amor mejor o peor, son sencillamente diferentes. La vida y la experiencia son directamente proporcionales y este es el motivo por el que encontramos tantas diferencias entre el amor adolescente y el amor adulto.

    Erich Fromm en su libro “El Arte de Amar”. Habla de una diferencia entre enamoramiento y amor. Nos enamoramos cuando conocemos a alguien por quien nos sentimos atraídos y dejamos caer frente a él o ella las barreras que nos separan de los demás.

    Durante la adolescencia se vive un cambio continuo, un sube y baja, se sufre una metamorfosis progresiva a nivel general que no siempre es fácil de llevar, el joven está conociendo, sintiendo, mirando y caminando por terrenos desconocidos, todo va bien, hasta que aparece ese sentimiento que nos desestabiliza, y por el cual todos hemos pasado: el amor romántico.

    Los noviazgos en la adolescencia son una aventura, pero, al ser principiantes, los altibajos están a la orden del día. Se mezclan las ilusiones con las frustraciones... Si las cosas no van bien, se presenta el sufrimiento.

    ¿Sabías que el amor en personas maduras existe y es muy positivo?, Existe gente que cree que existe un límite de edad para enamorarse, pero el amor en la edad madura es alcanzable, y presenta muchísimos beneficios para quienes lo experimentan y también para las personas que están a su alrededor, dado que siempre resulta agradable saber que las personas que más te importan están acompañadas y son felices.

    El amor en las personas mayores es un aspecto muy importante, porque da compañía y sobre todo ilusión, de cara a seguir hacia adelante, renace la motivación a vivir y se experimenta felicidad en pareja, al mismo tiempo que disfrutas junto a los tuyos. De hecho, está demostrado que las personas con pareja tienen vidas más largas y felices.

    El amor no tiene edad. Las personas mayores separadas, viudas o solteras no lo tienen todo perdido, enamorarse y conocer a una persona con la cual estar cada día es una sensación preciosa y que siempre buscamos, independientemente de nuestra edad. Por ello, nunca es tarde para encontrar el amor.

    Si hablamos de sus beneficios, el amor en las personas mayores de edad es muy positivo. Sobre todo, por lo siguiente:

    Compañía: el tener a una persona a tu lado es una de las cosas que más valoras cuando se es mayor. No solo te da compañía, sino que si te pasa algo esa persona puede ayudarte. Es uno de los principales beneficios.

    Ilusión: la ilusión de estar enamorado es algo que nunca se pierde. Las ganas de levantarte cada mañana para ver a la otra persona un día más siguen, a pesar de la edad, muy presentes. Esto es otra razón para seguir adelante un día más.

    Socializar: cuando se cumplen años se va dejando a un lado esta faceta y es importante no perderla. Buscar a alguien que nos siga acompañando es una buena manera de aprovechar y socializar.

    Es una forma de volver a tener ilusión por la vida, de vivir con más intensidad, siendo más feliz y viendo a los que te rodean felices al ver que estás estupendo/a. Por ello, independiente de la edad o de cómo nos encontremos, no hay que cerrar esa puerta.

    Aunque siempre queden cosas por aprender, llegamos a una edad donde sabemos lo que queremos, pero sobre todo lo que NO queremos. Hemos caído y nos hemos levantado. Hemos sufrido y aprendido. Por eso, el amor adulto es un amor maduro, comprometido, pausado, y profundo.

    Y no debemos olvidar que todo este aprendizaje empezó hace años, y que a amar se aprende amando.