Se abre el año
con el florecer de los geranios
abundancia y alegría,
llegada de algo bueno.
y el jardín me regala claveles
amor, fascinación, distinción.
en la plaza un cono de nieve
se derrite entre las manos,
en un nuevo calendario
caleidoscópico e incierto.
Enero refulge
al estrenar la vida
círculo vicioso de años añejos,
se inician los deseos,
nuevas rutas se trazan en el cielo,
se espera la esperanza del futuro,
se aleja la angustia de los duelos.
Volvemos al principio rutinario
del engranaje de la máquina del tiempo
soñando con amores
dibujando nuevos proyectos
queriendo ser diferentes
aunque sigamos siendo los mismos.
¡FELIZ AÑO NUEVO!