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Evangelización, Educación y Cultura

Noroeste, 50 aniversario de un periodismo comprometido

EVANGELIZACIÓN, EDUCACIÓN Y CULTURA

    Como una alternativa de periodismo independiente hace 50 años nació Noroeste, en la capital del estado, autoproclamándose como un periódico diferente, muy pronto también tendría su base presente en Mazatlán, donde se convertirá en un bastión informativo, sobre todo en el despertar político y social de Sinaloa.

    Noroeste, un término que señala la ubicación geográfica de nuestra patria, lugar desde donde surge una forma propia en el vivir de hombres y mujeres, incrustada en el contexto del mosaico cultural del pueblo mexicano, con parentesco, en cierta manera, con la sensibilidad de aquellas tierras que fueron nuestras pero un día las perdimos y ahora pertenecen a la parte sur de los Estados Unidos.

    Un 8 de septiembre, el mismo día en que la iglesia católica celebra el nacimiento de la Madre de Dios, en el año de 1973 surge el periódico Noroeste como una opción periodística, que analiza y profundiza la información para ponerla en contacto con la realidad en donde nos movemos.

    Seis años después de su surgimiento en la capital del estado; Noroeste se hace presente en la ciudad y puerto de Mazatlán, en donde por espacio de un tiempo seria el baluarte de esta institución, dedicada a la labor informativa.

    Preclaros nombres quedarían grabados en los inicios de aquellos ya románticos días, liderados, en la parte administrativa por el rosarense Silvino Silva Lozano, en la dirección general, desde la sede de Culiacán y por José Ramón Díaz Fonseca, en la dirección de Mazatlán.

    Con un aporte comprometido, detrás de ellos estaban los empresarios Manuel de Jesús Clouthier Rincón, Enrique Murillo y Jorge del Rincón Bernal, impulsando la titánica labor de democratizar la información, desde una crítica independiente, que pronto causaría confrontación y polémica.

    Desde las bases de sus principios originales, Noroeste ha sido constante en su caminar, con el compromiso de existir y estar en contacto con sus lectores, con los cuales ha establecido un intercambio de mutua fidelidad.

    En aquellos inicios era común escuchar el anuncio promocional, como un grito de batalla; “Noroeste si da color”, dando a entender la llegada de un nuevo medio periodístico que pretendía ser diferente, con la capacidad de revelar el tono de lo que informaba, en su mayor o menor intensidad, tal como ocurre en una sociedad con características heterogéneas.

    Dependiendo solo de la preferencia de la gente, muy pronto se percibió una forma diferente de informar sin depender del compromiso con alguien en particular y tan solo con aquellos quienes son sus destinatarios. Empezó así el auge de un nuevo periodismo en un Mazatlán inmerso en un clima político electoral, liderado por el periódico Noroeste.

    Hoy cincuenta años han pasado desde los inicios, en ellos ha habido momentos de esplendor y también de crisis, sobre todo en el aspecto financiero, en pos de la fidelidad al principio de no depender de nadie y tan solo de la aceptación de sus lectores, escuchando todas las voces y denunciando las irregularidades cuando ha sido necesario,

    Hoy han llegado otras voces periodísticas, que siempre serán bienvenidas, Noroeste hace un alto en su caminar, tiene ya un pasado, lleno de enseñanzas, se proyecta hacia un futuro, siempre pletórico de esperanza, pero hoy es el presente, oportunidad de vivir este áureo aniversario de un periódico que llegó para ser símbolo del noroeste de nuestra patria.