"Montaño Villalobos, una vida para la danza"
CULIACÁN._ Con las castañuelas en la mano, su corazón en la danza y agradecida es como Alicia Montaño Villalobos, maestra, bailarina e investigadora, recibió el Premio Sinaloa de las Artes de manos de María Luisa Miranda Monrreal, directora del Isic, y Gerardo Vargas Landeros, secretario general de Gobierno.
La también escritora dijo que había buscado las palabras para dar su discurso, y la única que encontró fue "gracias", que expresó con emoción la noche en que el Gobierno de Sinaloa la reconoció por contribuir con su obra al enriquecimiento del patrimonio cultural y al progreso del arte en la entidad.
El premio, que consiste en una medalla, reconocimiento y 150 mil pesos, le fue entregado por María Luisa Miranda Monrreal, directora del Instituto Sinaloense de Cultura; Gerardo Vargas Landeros, secretario general de Gobierno, en representación del Gobernador Mario López Valdez, como parte del Festival Cultural Sinaloa 2015.
"Alicia Montaño es una agradable fusión de inteligencia y belleza. Sólo hay que conversar con ella y observar ese rostro que desafía el tiempo, para hacerse una idea objetiva de una personalidad felizmente dorada por la naturaleza", expresó Miranda Monrreal de quien lleva más de 60 años dedicados a la danza.
La funcionaria destacó de la homenajeada la entrega incondicional al arte y su dedicación a la danza, el tiempo que ha empleado para capacitar docentes, siempre con la idea de que un pueblo que baila tiene que ser mejor.
"Alicia ha sido ejemplar en esta difícil tarea de la enseñanza. Numerosas generaciones han pasado por sus manos en esta eterna tarea de mantener vivo el folclor mexicano como parte fundamental de nuestra identidad", afirmó.
A través de un video, amigos de la maestra Alicia, también actriz, le expresaron su admiración, entre ellos Inga Pauwells, Doris Castro y Antonio Malacón Díaz.
El Centro Centenario Sinaloa de las Artes, no pudo ser mejor lugar para este homenaje. En el otrora Mesón de San Carlos recordó a un defensor del patrimonio histórico, a su amigo Miguel Tamayo Espinosa de los Monteros, quien luchó para que ese edificio no se derrumbara.
Tras recordar a amigos que desde otra dimensión la abrazan, Dora Josefina Ayala Castro y Rosa María Peraza, dijo que por más que intentó encontrar otra palabra para expresar al inicio de su intervención, no halló otra que no fuera "Gracias, gracias, muchas gracias".
Su agradecimiento primero fue para quienes ya habían propuesto su persona para este premio, a quienes en este año pensaron en ella, como el Cobaes, Instituto Municipal de Cultura de Culiacán, Instituto Sinaloense de las Mujeres, el Proyecto Cultural Yoreme, IMSS, Asociación de Periodistas 7 de Junio.
Mencionó también al Centro de Estudios Justo Sierra de Surutato Badiraguato, a la Asociación de Comunicadoras de Sinaloa, a Radio Sinaloa, al Centro Cultural de Guasave y al Instituto de Cultura de Ahome.
Agradeció también a los personajes de la cultura que apoyaron la propuesta, al jurado integrado por Francisco Frías Castro, secretario de SEPyC; María Luisa Miranda Monrreal, Elizabeth Moreno Rojas, de la UAS; Estefy Acosta Hernández, representante de la UdeO.
Sus palabras se entrecortaban en ese día que le será inolvidable, en el que llegó invadida de emoción a asumir un compromiso.
"Esta distinción conlleva un gran reto, el reto de ser digna de él, y seguir promoviendo la cultura a la medida de mis posibilidades a lo largo y ancho del estado, y fuera del mismo", expresó.
Montaño Villalobos hizo un homenaje a los sinaloenses que le antecedieron en este premio y dijo sentirse honrada de pertenecer a esta lista.
"Me siento honrada en pertenecer desde este día a la lista de los grandes sinaloenses, aunque yo sea la más pequeña de todos", sostuvo, en medio de aplausos.
"No soy una mujer con títulos universitarios. Soy una mujer forjada en la escuela de la vida, pero creo tener una maestría de la que me siento muy orgullosa, esa maestría se llama amor por Sinaloa".
Desde niña, narró, tuvo la fortuna de conocer, recorrer, escuchar y ver historias de personas y lugares desde Escuinapa hasta Choix, de la sierra a la costa. Ha constatado sus cambios, sueños y también sus tristezas, dolores y lágrimas. Vivencias que le hacen asegurar que no hay nada mejor que Sinaloa.
"Recibo este premio reconociendo que yo sola no tengo todos los méritos. Es cierto que la vida me ha dado la oportunidad de realizar muchas cosas en el área cultural, cosas que me han llenado de gusto y satisfacciones. Todo lo que he hecho ha sido de todo mi gusto, y cada acto en el que he participado me ha dejado una huella imborrable e inolvidable", indicó.
"Pero yo sola no lo hubiera realizado. Este premio se lo debo a mi padre y a mi madre, sobre todo se lo debo a Concha Villalobos, a mis hijos, nietos, que no han tenido una madre y una abuela normal, sin embargo, todos han sentido mi amor entrañable, ellos han sido el sostén de mi vida y mi estructura".
Recordó a Esther Almada de Andrade, que la guió diciéndole cómo enseñaba los bailes su hija Rosa Andrade, que después fue su maestra. También reconoció a Clemente Vizcarra, oficial mayor de gobierno, quien opinó para que se le diera una plaza de maestra, a pesar de estar muy jovencita para trabajar.
Recordó también a sus maestros Carolina Bazúa, Teno Terrazas, Yolanda Rábago del Corte, Roberto Hernández ,Juan Macedo López, Miguel Vélez, Miguel Schulz de Oaxaca, y agradeció el apoyo de trabajadores del Ayuntamiento, de Extensión Cultural de la UAS, a sus compañeros de Seguridad Social del IMSS de Navolato y Culiacán, entre otros,.
Sobre todo agradeció a quien hace 37 años le abrió las puertas del Centro de Estudios Justo Sierra, Antonio Malacón Díaz, que también estuvo presente, igual que sus alumnos.
"Esta noche las felicitaciones son para mí, pero todos los presentes y los que caminan por todo Sinaloa promoviendo la cultura merecen un premio y una gran felicitación, porque somos la cara buena de Sinaloa, porque somos el Sinaloa que nunca hemos aceptado la mancha de la violencia ni de la mala educación", aseguró.
"Porque somos el Sinaloa que danza y que baila, que hace teatro, que lee, que investiga, que escribe, que pinta y que dibuja y que grita a los cuatro vientos es un orgullo ser sinaloense, como escribiera en uno de sus poemas Dora Josefina Ayala Castro".
Para finalizar su discurso, la autora de Voces danzantes de Sinaloa leyó ese poema de Ayala Castro, con la intensidad con la que su corazón ha guiado su vida.
Su familia, amigos que llegaron de fuera, compartieron la emoción que fue más intensa cuando Laura Alicia y Karina, sus hijas mayores, recordaron aspectos de su vida y, sobre todo, cuando Georgina, la menor de sus herederas, entró a la escena para invitarla un paso doble con Cielo andaluz.
La maestra Alicia, tal vez esta noche tampoco iba preparada, pero sacó sus castañuelas para hacerlas sonar como sonaba en ese momento su corazón y enseguida estaba en la escena, al lado de su hija, con sus mejores pasos y la misma entereza, al ritmo que bailaba en su juventud.
Vargas Landeros resaltó que con la entrega de este premio, a la maestra Alicia, a quien conoce desde hace 29 años, se le está pagando una deuda estatal.
"Estamos entregando con toda justicia este premio importante a la maestra. Gracias por sus aportaciones a la niñez, a la juventud, a todo el estado de Sinaloa. El talento, cariño que ha entregado a esta tierra estoy seguro que lo va a ver multiplicado a través de su familia y en quienes la apreciamos".
BAILARINA E INVESTIGADORA
Alicia Montaño Villalobos es originaria de Culiacán.
Estudió en la Academia Mexicana de la Danza, en la Ciudad de México, y en la Escuela Estatal de Danza, en Sinaloa.
Ha sido maestra de danza en escuelas oficiales y particulares de 1951 a 1985.
Impartió talleres de danza en el Instituto Federal de Capacitación del Magisterio; fue directora de la Academia de Danza de la UAS y del IMSS.
Sus más importantes coreografías, montajes y direcciones realizadas son Danza de las horas, Rosa Andrade, El Tukul, Balada de la luna y el venado; Ixcoatl, zafra y fiesta, Alegría de Xochiquetzali, entre otras.
Es investigadora y promotora de la danza; ha publicado los libros "Sinaloa, danza y tradición", "La danza, tesoro de México" y "Voces danzantes de Sinaloa", entre otros.
En el 2009 recibió el Reconocimiento a la Labor Artística y Cultural.
Foto: Noroeste/Luis Brito
Aarón Sánchez, María Luisa Miranda, Gerardo Vargas Landeros y Elizabeth Moreno, presiden el evento.
Alicia Montaño Villalobos, rodeada de parte de su familia, es reconocida por sus más de seis décadas dedicadas a la danza.
Georgina Martínez Montaño invita un paso doble en el homenaje a su mamá, la maestra, bailarina e investigadora Alicia Montaño.