Conquístame,
sedúceme,
tómame,
hasta hacerme arena
en tu mar abierto.
Barcaza a la deriva
esquivando oleajes que golpean
el casco del deseo.
Es el cuerpo mío,
pechos, pelo, muslos de sirena
en el mar del norte de tu cuerpo.
Agua evaporada por los años
tormentas boreales saltan por los ojos
temblor en el fondo de las aguas
ebullición que estalla en olas
que se crispan tragándose
el placer azul de la vida.