"Will Perdue, ex compañero de Michael Jordan en los Bulls, confiesa que sufrió un calvario con el astro"

"Will Perdue ganó tres anillos con los Chicago Bulls, pero la estrella le puso un feo apodo y llegaron a tener un fuerte enfrentamiento en un entrenamiento"
03/05/2020 17:53

    CIUDAD DE MÉXICO._ El nuevo documental sobre Michael Jordan sigue dando qué hablar y el último en sumarse a este particular carrusel de declaraciones ha sido el pívot Will Perdue, ganador de tres anillos con los Chicago Bulls y de otro más con San Antonio Spurs.

    Tras los comentarios de Carmen Electra sobre Dennis Rodman, o de Isiah Thomas cargando contra el equipo de Illinois, esta vez ha sido el ex jugador de 2.16 metros de altura el que ha querido recordar su paso por Chicago y cómo vivió un calvario con Jordan como compañero por las continuas humillaciones de éste cuando llegó a la franquicia.

    En una entrevista con FanSided, el que fuera jugador de los Bulls desde 1988 a 1995 confesó que Jordan no se tomó bien que fuera parte del equipo porque no le veía capaz de hacer honor a su apellido. Y es que Perdue era el nombre de uno de los mejores equipos universitarios de aquella época.

    “Me dio vergüenza desde el principio. Michael sólo conocía dos cosas: la ACC (Atlantic Coast Conference) porque allí jugaba, y los Big Ten, porque en los años 80 sólo se veía el baloncesto local. Cuando me reclutan y ve el apellido Perdue me miró como si no fuera lo suficientemente bueno como para jugar en Perdue, así que me empezó a llamar Will Vanderbilt (por ser su universidad de origen). Casi nunca me vio jugar, no sabía mucho sobre mí e hizo una declaración a ciegas. No lo tomé como algo personal, pero me dolió un poco”, aseguró.

    No obstante, Perdue contaba con el respaldo de la dirección de los Bulls, que lo había seleccionado en el puesto número 11 del draft de 1988. Su trabajo y su esfuerzo le permitieron cambiar la situación y se convirtió en una pieza clave en la rotación del equipo hasta conseguir poco después el primer título de la franquicia.

    “Seguí trabajando. Creo que vio mi ética de trabajo. Siempre estaba en el gimnasio, en la sala de pesas y no retrocedía. Acepté su desafío, seguí practicando duro y, a medida que comencé a jugar lentamente, comencé a construir una confianza”, confesó.

    ENFRENTAMIENTO CON JORDAN EN UN ENTRENAMIENTO

    La tensión entre ambos y la competitividad de Michael Jordan provocaron un tenso enfrentamiento en un entrenamiento, tal y como desveló en 2015 otro jugador del equipo: Horace Grant.

    “Nuestros entrenamientos eran bestiales. Phil Jackson, para llevarlo todo al límite, ponía a Jordan en el equipo de los suplentes y a Scottie Pippen y a mí en el de los titulares. Eso para Jordan, con su carácter, era inimaginable. Había peleas, se lanzaban puñetazos, de todo. Al menos no estaban siempre por ahí los periodistas como pasa ahora.

    “Una vez Will Perdue le puso un bloqueo ilegal a Jordan y éste le dijo que no lo volviera a hacer. Pero Phil Jackson insistió en que repitiéramos los movimientos y Michael se lanzó contra Will y boom. Corrimos a agarrar a Will para que no hiciera daño a Jordan. Al día siguiente, en el avión, tenía todo el ojo morado”, explicó.

    Perdue formó parte del intercambio que llevó a Dennis Rodman a los Bulls y aterrizó en San Antonio Spurs, con los que en 1999 ganó el cuarto anillo de su carrera. Ahora, con el paso de los años, ha recordado cómo vivió su primer encuentro con Jordan y lo que pensó sobre él.

    “Me di cuenta de inmediato, me refiero a la primera práctica en el campo de entrenamiento en octubre de 1988, que era de una raza diferente. Una cosa es escuchar las historias, pero experimentarlas de primera mano… Este tipo quiere ganar cada ejercicio, cada juego de tiros, cada golpe de gracia. Nunca había experimentado algo así. Me hizo más competitivo, me hizo un trabajador más duro, me hizo comprender cuál era la definición de intensidad. También me ayudó a respetarlo mucho más porque no creo que la gente se dé cuenta de lo difícil que es ser tan bueno todo el tiempo”.