"El chino que nunca se rindió"

Flavio Córdova

PRIMERA DE DOS PARTES

CULIACÁN._ Cuando revisas el récord de Cosme Rivera es difícil no poder dudar del espacio destinado a los títulos. 

Aunque hoy tiene récord de 35 victorias, 24 por nocauts, 17 perdidas y tres empates, su nombre es conocido en diferentes lugares, en donde seguramente fue muy difícil verlo pelear y no emocionarse. 

El número que aparece en el espacio de títulos es 17. Todos diferentes. 

Podrían decirles títulos de cartón, regionales, de organismos poco conocidos o desaparecidos, pero lo cierto es que el "Chino" Rivera ha disputado, desde el primero hasta el último, como si fuera un título del mundo. 

Actualmente el culiacanense por adopción -pues nació en Huatabampo, Sonora-, es el clasificado nacional 17 de los Súper Ligeros y el número 96 a nivel mundial. 

Esta es su historia...

El boxeo le llegó de golpe
Cuando mi papá llegó aquí a Culiacán, yo acababa de pelear con Anderson. Era un debutante y tenía el ojo así, bien hinchado, y yo nomás abrí la puerta, ni me fijé quién era y abrí porque a esa hora llegaba mi hermana del hospital, recuerda en estos días el Chino. 

Miró el sombrerote y casi gritó ¡mi apá! 

"Y me dijo ¿qué tiene?, ¿por qué te tapas? y ya le dije, es que peleé apá, '¿cómo?, ¿dónde peleaste?, ¿en la calle?", narró. 

"No, debuté', le dije, '¿cómo que debutaste?' Él no sabía de esas palabras. 'Debuté profesional, en el boxeo apá, peleé, gané dinerito". 

De aquel episodio en su vida, el "Chino" rescata el consejo de su padre: si vas a seguirle, con ganas, échale todo, porque también es disiciplina. 

"Y pues aquí me tiene a 18 años y ya ahorita todavia emocionado con este deporte", expresó emocionado. 

Cosme Rivera Yocupicio comenzó en el boxeo a los 15 años, en su natal Huatabampo. Desde pequeño el nació el gusto por este deporte. No se perdía una sola función en la televisión. 

Fue entonces cuando empezó a escaparse a un gimnasio cerca de su casa, el único en Huatabampo, con Regino Corrales el "Rejas", él era el entrenador de ese gimnasio, donde también estuvo el campeón nacional Gustavo "Taviro" Corral. 

"De hecho mi papá no quería que yo boxeara. Él sabía que andaba muy metido, que le ponía mucho entusiamo a una función de boxeo, y cuando pasó mucho tiempo, él supo cómo me andaba yendo a escondidas al gimnasio", recordó. 

"Ya me veía que a veces moreteado, a veces con la mano engarrotada, de que no la podía mover pues, y decía ¿qué tienes? y yo... no le decía que andaba entrenando, pero él se dio cuenta". 

Y aunque se daba cuenta, el niño Cosme Rivera seguía escapándose, con mentiras piadosas para poder ir a entrenar. Creció entre una ladrillera o pastoreando un pequeño número de ganado, Eso fue su coartada perfecta. 

Después su papá prefirió tratar de alejarlo del boxeo, enviándolo a Culiacán, donde ya residía su hermana, quien estaba estudiando enfermería. 

"Me mando aquí en Culiacán, pero aquí en Culiacán ahora que si me mandó, como quien dice, a la mera mata del boxeo", recalcó. 

"Me mandó a donde yo estaba en el albergue estudiantil, había dos gimnasios, en medio de esos dos gimnasios vivía yo, uno era de Don Inés Torres y el otro era de Martín "Chino" Fing, y ahí fue donde empecé con Don Inés Torres ya bien, amateur, y ya metido bien en la cabeza de que quería ser un peleador, un boxeador profesional", comentó con una sonrisa.

Inicia el camino por su sueño
Una vez instalado en la casa estudiantil, le cayó como anillo al dedo, justo en medio de dos gimnasio, el destino lo ponía de vuelta a los ensogados. 

Ahí mismo en el gimansio de Inés Torres conoció también el profesor Jesús Aispuro, quien llegaba invitando a los muchachos al gimnasio de la Universidad Autónoma de Sinaloa, y que lo incluyeran como si fuera una matería para la escuela. 

No fue fácil llegar y adaptarse, ya que Cosme Rivera, además de la escuela y el gimnasio, tenía que trabajar en la obra. Como albañil o pintor. 

La vida lo llevó a trabajar en la construcción de una plaza comercial, y curiosamente en ella abrió un restorán en donde consiguió un nuevo empleo. 

La escuela tampoco fue su fuerte, prefería irse al gimnasio antes que bucarle respuesta o entender alguna tarea, se conformaba con perdirle a sus compañeros que se la pasaran, aunque hizo varios esfuerzos por no dejarla e inmediato .

Un paso fugaz por el boxeo amateur.

En aquellos años había menos gimnasios y menos torneos amateurs organizados, por lo que conseguir una foja como las de hoy, que rondan entre las 600 o un millar de peleas amateur, era prácticamente imposible. 

Rivera Yucupicio peleó apenas en nueve ocasiones a lo largo de tres años. 

"Duré tres años en el amateur, porque en ese tiempo, no habia muchos torneo", recordó. 

"Nosotros teniamos que seguir los torneos a Guasave, a Los Mochis, a Mazatlán, salirnos a Eldorado, porque aquí no había". 

Y aunque no recuerda mucho de su paso por amateur, lo guarda con mucho cariño y desea haber podido tener más experiencia antes de debutar, como ahora la tiene. 

Además de que no fue fácil, ya que el hecho de ser foraneo, pensaban que ya venía con mucha lona recorrida. 

"Ya que estaba apuntado, nadie queria pelear conmigo, quedaba campeón así sin pelear y ya", lamenta. "Decía: pues no, no me gusta', como yo no era de aquí. me nombraban de Huatabampo, me decian que yo ya venia experto, que traía mucha lona recorrida y nada, que no era así, sólo que me gustaba y aprendí lo que me gustaba rápido".

Un debut triunfal en el profesionalismo
Durante la función que iba a debutar, lo iba a hacer ante el culiacanense Miguel Páez, pero hubo una confusión por su apodo, por lo que le toco debutar contra Adrián Anderson, quien era un invicto de 6-0. 

Al final logró salir vivo de esa, con un empate de por medio. 

Pero el inicio no fue el esperado para Cosme Rivera, ya que como cualquier otro boxeador que iba iniciando, la paga era muy poca. Pero desde ese momento ya soñaba con ser campeón nacional. 

Sólo hizo cuatro peleas en la capital sinaloense cuando su manejador Inés Torres se mudó a Tjuana y siguiendo a Don Inés, Rivera Yocupicio decidió emigrar a la ciudad fronteriza.

También jugó al beisbol
A pesar de que su pasión era el boxeo, como todo niño, Cosme Rivera comenzó sus andares en el deporte, dentro del beisbol, donde jugaba como cátcher en la Liga de los Paperos en Huatabampo. 

Durante tres años estuvo practicando el llamado Rrey de los deportes; sin embargo, fue su mudanza a la capital sinaloense lo que cortó su carrera en el beisbol. 
"De hecho yo fui selecccionado nacional tres años de beisbol. Nomás que en esas edad de que yo estaba entrenando el beisbol se me mandó para acá a Culiacán y dejé el beisbol", comentó Rivera Yocupicio. 

Pero gracias a un hermano suyo que practicó el boxeo, fue que él se inclinó por el deporte de los guantes.

FICHA TÉCNICA
Cosme Rivera Yocupicio
Edad: 37 años
NACIMIENTO: 19 de julio de 1976
ORIGEN: Huatabampo, Sonora
DIVISIÓN: Welter Ligero
APODO: Chino
RÉCORD: 35 (24 KO) ganadas, 17 (4 KO) perdidas y 3 empates
CLASIFICADO NACIONAL: 17
CLASIFICADO MUNDIAL: 96
TÍTULOS: 17 diferentes campeonatos