Soberanía y autosuficiencia

    No es 'pecado depender' en parte del exterior, mientras ello no signifique perder libertad, autonomía y autoridad.

    Aunque los conceptos de soberanía y autosuficiencia no son homologables, pues se puede ser autosuficiente en algo y no tener o perder soberanía, o bien, se puede gozar de soberanía y autodeterminación, pero carecer de algunos elementos necesarios o indispensables para la sobrevivencia; habría que insistir que no siempre la autosuficiencia es deseable pues, si producir algo internamente es más caro que adquirirlo del exterior, se tendría que buscar un equilibrio entre producirlo aquí, en función del empleo y del aprovechamiento de los recursos propios y la compra externa, para aprovechar el menor costo. Así pues, no es “pecado depender” en parte del exterior, mientras ello no signifique perder libertad, autonomía y autoridad.

    1. Donde México sí ha perdido soberanía es en el problema de los migrantes que cruzan el país para acceder a Estados Unidos, pues el gobierno perdió control en sus fronteras al no ser capaz o no querer detener a los miles de migrantes centro y sudamericanos, caribeños y orientales, a quienes primero “se les invitó” a pasar libremente por México y ahora han perjudicado las relaciones con Estados Unidos que ha “obligado” a México a retener en el país a más de 780 mil migrantes tan solo en 2023, protegerlos, alimentarlos (aunque sea precariamente), medicinarlos y en muchos casos, repatriarlos, es decir, Estados Unidos nos convirtió en “un país seguro” para su beneficio y eso, quiérase o no, es perder soberanía; vaya, hasta se ha orillado a México a conceder visas de trabajo y permanencia temporal y hasta la ciudadanía.

    Un poco al margen de lo anterior, se puede decir que México sí es autosuficiente en nuestros propios migrantes, pues el flujo de mexicanos que “huyen” de aquí a Estados Unidos fue de 760 mil detenidos o expulsados en 2023, según la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de aquel país.

    2. También, quiérase o no y aunque se quiera ocultar, México ha perdido soberanía en cuanto al problema del narcotráfico, la delincuencia y los cárteles; Estados Unidos “nos exige” más atención y control a los cárteles que, como expuso ante la Cámara de Representantes el Fiscal General Estadounidense, Merrick Garland, “los cárteles tienen más dinero que algunos Estados-Nación, y hay lugares en México donde es difícil lidiar con los cárteles”; igualmente la Directora de Inteligencia de Estados Unidos, Avril Haines, en su comparecencia anual en el capitolio sobre las amenazas globales a su país, expuso que “Los cárteles de la droga tienen el control sobre diversas partes de México en las que el Gobierno no tiene un dominio efectivo”.

    El solo hecho de que la delincuencia organizada tenga más presencia y dominio sobre territorio y población nacional es ya pérdida de soberanía y de autoridad y esto sí es muy grave, pues el gobierno no está cumpliendo su principal obligación: la seguridad de sus ciudadanos.

    Al margen de lo anterior, habría que decir que sí somos autosuficientes en producción, trasiego y exportación de estupefacientes, así como de empresas y cárteles de narcotráfico no sólo a Estados Unidos, sino también a Europa y Sudamérica, todo lo cual produce un increíble flujo de divisas al país.

    Además, se tiene récord en homicidios pues si hasta marzo se calculaban casi 185 mil muertos por violencia, para el final del sexenio se tendrían más de 200 mil víctimas de la violencia; a esto habría que agregar que, según el Portal Alemán “Statista”, en El Universal del 14 de marzo, de las 20 ciudades consideradas más peligrosas del mundo están 9 de México, desde Celaya y Tijuana, hasta Zacatecas y Acapulco, y también se tienen récord en desaparecidos, extorsión, feminicidios, como reporta Noroeste del 19 de mayo en Columna de Rubén Aguilar.

    3. Probablemente la más grande insuficiencia que ha padecido México en su historia, es la de jóvenes capacitados y actualizados en las nuevas tecnologías y adelantos científicos, por cuya falta perdemos soberanía. Nuestro sistema educativo es deficiente; no “producimos” los ejecutivos y funcionarios públicos que faciliten el salto económico y social que el país requiere y no es por falta de talentos; los estudiantes que sobresalen tienen que irse al extranjero y generalmente allá se quedan y esto también es pérdida de soberanía; dependemos del conocimiento extranjero para el desarrollo. Sin embargo, habría que preguntarse ¿qué pasa con los talentos que no alcanzan a irse al extranjero? Lo más probable es que al quedarse aquí, se frustran ellos y se frustra México al no contar con suficientes mexicanos innovadores y de avanzada.

    -

    cp_rafaelmorgan@hotmail.com