Reconocimiento ‘Ernesto Galarza’ 2023 para José Ángel Pescador Osuna

En el año 2016, un grupo de colegas y amigos interesados en el tema de la migración internacional, fundamos la asociación civil “Mazatlán Fraterno”, cuyos objetivos principales son dos: en primer lugar, brindar apoyo, en su tránsito, a las personas en condición de movilidad, que se han visto obligadas a dejar sus lugares de origen por distintas causas. Y, en segundo, llevar a cabo actividades de investigación sobre los procesos migratorios, tanto al interior de México, como de la migración internacional.

Como parte de nuestras actividades, en años recientes hemos hecho entrega de un reconocimiento a personas que se esfuerzan por asistir y ayudar a personas migrantes, tanto en Sinaloa como en la región noroeste de México. A este reconocimiento lo hemos denominado: “Ernesto Galarza”.

El Doctor Ernesto Galarza fue un migrante mexicano, activista, académico y poeta que nació en Jalcocotán, Nayarit el año de 1905. Parte de su infancia la vivió en la ciudad de Mazatlán, Sinaloa, donde le sobreviven algunos familiares. Cuando él tenía 8 años de edad, su familia emigró a los Estados Unidos.

Galarza fue un activista que defendió arduamente a los trabajadores agrícolas allá en el norte por gran parte de su vida. Estaba preocupado por las malas condiciones en las cuales tenían que vivir los inmigrantes mexicanos, y trabajó para organizar sindicatos en California. Se volvió un asociado de los trabajadores migrantes; los conocía personalmente, escuchaba sus problemas, y los motivaba como lo hace un amigo. Su inteligencia y templanza le hizo ganarse el apodo de Man of Fire (hombre de fuego).

Ernesto Galarza ganó fama por su escritura, escribió más de una docena de libros, entre sus obras más destacadas están: “Extraños en nuestros campos”, “Comerciantes de trabajo”, y su autobiografía “Barrio Boy”. En este último relata su vida en la ciudad de Mazatlán. Su escritura fina y crítica le hizo recibir la nominación al Premio Nobel de Literatura en 1979, siendo el primer latino con tan distinguido mérito.

Galarza murió un 22 de junio de 1984 en San José, California, pero todavía se siente mucho la influencia de su trabajo en las comunidades latinas y obreras en Estados Unidos.

Con la intención de inmortalizar su legado, hacemos este humilde esfuerzo desde la Asociación Civil “Mazatlán Fraterno” entregando este reconocimiento que lleva su nombre. En las cuatro ediciones anteriores hemos reconocido el trabajo de ciudadanos que realizan labor social y humanitaria, sobre todo dirigida a personas en situación de movilidad.

En la primera edición del año 2017, la galardonada fue la enfermera jubilada Ubaldina López Sánchez; quien por años ha asistido a migrantes que transitan por Mazatlán rumbo a Estados Unidos.

En el 2018, Irineo Mujica Arzate; líder de la organización “Pueblo sin fronteras”, fue quien recibió el reconocimiento. Irineo ha fundado tres casas de migrantes en la frontera norte de México, y desde hace años asiste a migrantes internacionales rumbo a la Unión Americana.

José Ángel Barajas (en paz descanse); presidente de la Fraternidad Sinaloense de California, fue a quien reconocimos en el año 2019 por su labor como activista por los derechos civiles de los sinaloenses en Estados Unidos.

El año 2021, otorgamos el reconocimiento al Doctor Epifanio Castañeda Labra, quien durante gran parte de su vida ha apoyado con despensas, aparatos ortopédicos y consultas médicas a personas que se encuentran en condición de desplazamiento interno forzado.

Este año 2023, hemos decidido otorgar el reconocimiento “Ernesto Galarza” al maestro José Ángel Pescador Osuna. Entre los múltiples cargos públicos que ha ocupado José Ángel, fue el de cónsul general de México en Los Ángeles, California.

Entre otras cosas, desde ese cargo impulsó la construcción de clubes y fraternidades de migrantes mexicanos en la Unión Americana, y fue un gran defensor de los mexicanos ante las amenazas y ataques antiinmigrantes. El maestro José Ángel también fue uno de los principales promotores para que se aprobara la doble nacionalidad, la cual dio paso para que muchos mexicanos se naturalizaran en aquel país. También pugnó para que las compañías encargadas del envío de remesas bajaran sus tarifas y pagaran un tipo de cambio más justo frente al dólar.

El maestro José Ángel Pescador Osuna conocía personalmente a los inmigrantes mexicanos; era su amigo, los escuchaba y ayudaba, tal como lo hacía Ernesto Galarza durante el siglo pasado.

Por todo esto y mucho más, el próximo lunes 4 de diciembre, a las diez de la mañana, estaremos honrando su labor humanitaria en el auditorio de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad Autónoma de Sinaloa.

Honor a quien honor merece.

Es cuanto....