La biodiversidad es la base de la vida en la Tierra, además combate el cambio climático y sostiene los sistemas alimentarios que nutren al mundo. Sin embargo, estamos presenciando una crisis sin precedentes: los hábitats están desapareciendo y hasta un millón de especies se enfrentan a la extinción, 1 lo que amenaza las vidas y los medios de subsistencia de millones de personas que dependen de ellas. Esta es la realidad que vivimos, mientras las naciones se preparan para la 16ª reunión de la Conferencia de las Partes en el Convenio sobre la Diversidad Biológica de las Naciones Unidas (COP16) que se llevará a cabo en Cali, Colombia, del 21 de octubre al 1 de noviembre.
Las expectativas son altas ya que el año pasado, durante la COP15, se estableció el Marco Mundial de Diversidad Biológica Kunming-Montreal, el cual es un acuerdo histórico que dio lugar a cuatro objetivos audaces para 2050 y 23 metas que se deben lograr para 2030. Por ello, se espera que este año los países reporten los primeros resultados de las Estrategias y Planes de Acción Nacionales sobre Diversidad Biológica (NBSAP, por sus siglas en inglés).
El objetivo de la COP16 es ver los compromisos del Marco Mundial para la Diversidad Biológica Kunming-Montreal 2022 aterrizados en planes viables. La implementación de este Marco exige la cooperación mundial, reconociendo el papel fundamental de la biodiversidad en nuestra seguridad alimentaria, estabilidad climática y salud planetaria. En última instancia, y no es para menos, las decisiones que se tomen en la COP16 darán forma al futuro de nuestro planeta.
Poner en marcha estos planes será el tema central de la reunión y es absolutamente esencial para lograr un futuro sostenible. La COP16 será el espacio para que los países compartan los retos y desafíos para que sus NBSAP se alineen con los compromisos del año pasado, respecto al uso eficiente de los recursos para la financiación de las acciones, buscando regular el acceso y la distribución de beneficios. Sin embargo, para que la implementación funcione, tanto los gobiernos como los actores del sector privado junto con la academia y la sociedad civil deben encontrar posibles soluciones o desarrollar acciones viables para que los cambios necesarios ocurran.
La principal causa de la pérdida de biodiversidad es la pérdida del hábitat, de la que la producción agrícola es un factor clave. Varias metas del Marco buscan abordar este problema, incluida la de facilitar opciones de consumo sostenibles para reducir el desperdicio y el consumo excesivo. Con el comercio globalizado de productos agrícolas, las decisiones que se toman en lugares remotos del mundo pueden tener profundas consecuencias para las especies y los ecosistemas.
Además, tanto las investigaciones como los debates sobre políticas suelen centrarse en la tierra, cuando también es importante comprender mejor la crisis de biodiversidad que enfrenta el océano, donde el cambio climático, la contaminación y la sobrepesca son algunos de los principales impulsores. La mayor parte de la contaminación proviene de la tierra, y los cambios en los ecosistemas costeros pueden tener consecuencias graves al medio ambiente.
En muchas de las discusiones de la COP15, la bioeconomía se perfiló como una alternativa a los modelos económicos insostenibles que han provocado la pérdida de biodiversidad en los países tropicales. La COP16 presentará una gran oportunidad para repensar, construir y acelerar la transición hacia nuevos modelos económicos basados en el uso sostenible de la biodiversidad. Esto es de particular importancia para los países de América Latina, donde la biodiversidad es muy importante para la vida y está en riesgo de desaparecer, y en donde se espera que los efectos e impactos del cambio climático, como las olas de calor, la disminución del rendimiento de los cultivos, los incendios forestales y los eventos extremos del nivel del mar, serán más intensos. 2
Por lo tanto, hay que seguir las discusiones y exigir políticas públicas bien diseñadas que protejan nuestros ecosistemas, pues no se puede solucionar el problema del cambio climático con los mismos mecanismos de mercado que nos han traído a la crisis climática que actualmente atravesamos.
* Ariana Escalante Kantún es investigadora en el programa de Territorio, Derechos y Desarrollo de @FundarMexico.
1 Ver Crisis de la biodiversidad: La extinción engendra extinción.
2 Ver Cambio climático: América Latina será una de las regiones más afectadas.
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