Noroeste explicado
Aunque puede calificarse como una fecha arbitraria impuesta por el hombre para medir el tiempo, el fin de un año y el inicio de otro es siempre para destacar. A los humanos nos gusta cerrar ciclos y abrir nuevos, y el cambio de año es un buen momento.
Si 2020 fue un año de retos para todos, el periodismo no fue la excepción, aunque podría decirse que los periodistas tenemos más callo en esto, pues venimos de ya casi una década de tiempos difíciles y llena de desafíos por la llegada del periodismo digital y la crisis de los medios impresos.
Digamos que para nosotros fue una crisis continuada la que vivimos el año que recién termina, y sabemos que este 2021 no será la excepción.
Pero si en algo nos han servido estos años de crisis es a ser resilientes, es decir, a ser flexibles, de mente abierta, dispuestos y adaptables a los cambios, y todo sin dejar de informar de manera continua, que es nuestra labor principal.
El 2020 nos dejó el aprendizaje de mantener los temas utilitarios básicos en nuestra agenda diaria, pues la salud y la educación se convirtieron en el eje del flujo informativo en estos meses de pandemia
También nos obligó a reportear a distancia, pues aunque ya lo hacíamos en cierta forma, este año que pasó nos llevó a explorar herramientas virtuales para entrevistas y ruedas de prensa, a dar seguimiento a transmisiones en vivo, a cubrir coloquios, congresos a través de zoom o sacar información siguiendo las redes sociales de líderes de opinión y personajes famosos.
Y, sobre todo, 2020 nos reiteró la certeza de que la información de calidad y a tiempo es la clave para continuar vigentes con los lectores. Que la credibilidad de medios serios se sobrepone ante las fake news y que el lector y suscriptor siempre sabrá distinguir la diferencia.
Sin duda, el año que cerró nos deja mucho aprendizaje y necesidad de adaptación.
Viene un año igual o más difícil, la necesidad de información certera sobre salud seguirá vigente, y se vienen los meses complicados en lo electoral.
Ya lo hemos comentado en anteriores artículos, para el periodismo, y sobre todo para medios independientes como Noroeste, las épocas electorales son álgidas y de mucha tensión. La necesidad de información útil y veraz en un ambiente crispado y de mucha posibilidad de manipulación por los actores políticos es apremiante y nosotros tenemos la responsabilidad de darla.
Así lo haremos. No lo dude. Aunque nos cueste. Nuestra lupa periodística estará puesta sobre todo el acontecer electoral.
Además de lo útil, lo positivo
Para cerrar un año tan difícil, más que resumir lo trágico, quisimos mejor destacar el #OrgulloSinalonese, quisimos destacar a un personaje y a una institución como personalidades del año y le llamamos Portada 2020.
Ahí elegimos al beisbolista culiacanense Julio Urías, campeón de la Serie Mundial con los Dodgers, y al personal médico de Sinaloa que se convirtió en el primer frente de la lucha contra el Covid-19.
A ambos les rendimos el homenaje que nosotros podemos hacer y es repasar sus historias en nuestras páginas, como agradecimiento por hacernos sentir orgullosos.
Rey Mago
Por último, pero no menos importante, antes de cerrar la época navideña no podemos dejar de dar las gracias a todos nuestros lectores que colaboraron esta temporada con la campaña Se busca un Rey Mago.
Era un año difícil para continuar esta tradicional campaña institucional de Noroeste, pero no quisimos dejarla pasar. Los niños en situaciones vulnerables en las colonias de nuestras ciudades, ahora recluidos por la pandemia, merecían un pequeño detalle dentro de toda sus penurias, y eso fue lo que nos motivó a hacerla una vez más, pese a la difícil situación económica que sabemos enfrentan la mayoría.
Afortunadamente nuestros lectores no nos fallaron y tanto en la Redacción de Culiacán como en la de Mazatlán recibimos numerosos juguetes y hasta tablets para donar a los pequeños cuyas historias publicamos durante todo el mes de diciembre.
Muchísimas gracias, queridos lectores, por responder.