Mujeres policías proscritas en Sinaloa. Dignora, sola contra la discriminación

OBSERVATORIO
    Ojalá fuera sólo en Ahome, pero la tentación opresiva sobre la mujer, propia de neandertales con cargos en el gobierno, prevalece en pleno Siglo 21 y se asume como modelo ideal en las policías sinaloenses

    Poco se supo aquella mañana del reciente 2 de agosto que a la agente de la Dirección de Seguridad Pública de Ahome, Laura Elena Valenzuela Espinoza, se le entregó un reconocimiento en la sindicatura de San Miguel Zapotitlán, por haber participado en el rescate de dos mujeres que a bordo de un automóvil cayeron en un canal de la zona de El Carrizo. Fue gracias a la intervención de Rosario Dignora Valdez López, la policía que defiende la igualdad de género en esa corporación, que el Gobierno de Manuel Guillermo Chapman Moreno procedió a enmendar la misoginia que lo caracteriza.

    Es que, en el proceder pueril del director de la corporación, Carlos Francisco Rodríguez Ponce, durante los festejos del Día del Policía les entregó reconocimientos solamente a los dos elementos varones que intervinieron en el acto heroico e ignoró a la Laura Elena Valenzuela cuya participación fue igual de crucial en el salvamento. De esta manera, aunque la segregación ocurrió en Ahome, quedó recalcada en todo Sinaloa la mentalidad machista de políticos y jefes policiacos.

    Según datos del informe 2020 de avances en el Programa de Fortalecimiento de Capacidades Institucionales de la Corporaciones Policiales en el Estado de Sinaloa, de total de elementos activos el 14 por ciento son mujeres y 86 por ciento hombres, “observándose una cada vez mayor incorporación de estas últimas a los cuerpos de policía”, pero en ningún apartado del documento se trazan políticas para abatir la violencia de género al seno de las instituciones de seguridad pública.

    No obstante que a las mujeres se les ve cada vez más a bordo de patrullas que vigilan la ciudad o integradas a las unidades especiales y de resguardo de instalaciones estratégicas, así como poniendo orden en materia de vialidad urbana, persiste la mentalidad arraigada dentro y fuera de la fuerza pública estatal que las considera de grado e importancia inferior a la de los policías del género masculino. Botón de muestra es que en Sinaloa se les ha relegado históricamente a ellas en el mando policiaco o al frente de las dependencias de seguridad pública.

    Tal episodio de violencia de género vivido por Laura Elena Valenzuela confirma que el prejuicio misógino está enraizado en lo profundo del poder público, donde la dignidad humana se devalúa conforme se afianza la mentalidad bárbara del sexo fuerte contra el sexo débil. Ojalá fuera sólo en Ahome, pero la tentación opresiva sobre la mujer, propia de neandertales con cargos en el gobierno, prevalece en pleno Siglo 21 y se asume como modelo ideal en las policías sinaloenses.

    Por fortuna, en este testimonio del machismo como estilo de gobierno apareció de nuevo en escena la luchadora social Dignora Valdez que en el acto para festejar a los policías, encabezado el 13 de julio por el Alcalde Chapman Moreno, protestó porque “las mujeres siguen siendo invisibles en las corporaciones policiacas”, postura similar a la que el 8 de marzo de 2019 le valió un arresto por denunciar la desigualdad en la Dirección General de Seguridad Pública y Tránsito Municipal.

    Sin estar enterada aún de la injusticia cometida contra Laura Elena Valenzuela, a Dignora la asistió la razón a las horas de indisciplinarse frente a “Billy” Chapman. Se comunicó con ella la agente de San Miguel Zapotitlán para narrarle cómo la segregó el director de la DSPyTM de Ahome por pertenecer el segmento femenino de la corporación. Valdez López visibilizó el caso ante la sociedad y ello dio lugar a que se decidiera reconocer a la mujer policía que les prestó auxilio a las dos mujeres que sufrieron aquel peligroso percance vial.

    Pero la misoginia del gobierno chapmista continuó empeñándose en hacer de las suyas. El homenaje a Laura Elena se efectuó en un acto cerrado en las oficinas de la sindicatura, sin invitar a medios de comunicación y con la ausencia del Alcalde. El jefe de la corporación, Carlos Francisco Rodríguez Ponce, daba la impresión de sentirse exhibido, derrotado por una mujer, y a pesar de que el Ayuntamiento quiso que pasara desapercibida dicha distinción, Dignora socializó el evento y logró que la sociedad de sumara al reconocimiento a la policía heroica.

    En resistencia, no en rebeldía, Dignora Valdez personifica la defensa de la dignidad de las mujeres policías frente a la desigualdad a la que las somete el arcaico machismo que atrofia la mentalidad de los responsables de la seguridad pública en los municipios, inclusive de los presidentes municipales y no se diga de los agentes hombres. Se les relega en la definición de mandos, otorgamiento de reconocimientos, tabuladores salariales y están sujetas a un acoso y escarnio permanente de parte de ellos.

    Lo más grave es que como primeros interesados de que la seguridad pública se fortalezca en Sinaloa, sin desplantes de superioridad de un género sobre el otro, los ciudadanos le restamos importancia a la actitud gregaria de las jerarquías en seguridad pública y en el resto de la estructura gubernamental que dispersa en lugar de compactar el esfuerzo por la paz y la legalidad. Qué más evidencia que la burla de Manuel Guillermo Chapman al desobedecer en marzo de 2019 al Congreso del Estado cuando la 63 Legislatura lo conminó a anular el arresto de Dignora Valdez.

    Reverso

    Billy en sus ofuscaciones,

    No supo que la mujer policía,

    Lo evidenció en la cobardía,

    De la falta de pantalones.

    ¿Una mujer a SSP estatal?

    Para no incurrir en omisiones de perfiles destacables evito mencionar a las mujeres sinaloenses que bien podrían desempeñarse como Secretaria de Seguridad Pública en el Gabinete de Rubén Rocha Moya, igual que en 2015 Mario López Valdez caló la mano femenina al frente del combate a la violencia, con Josefina de Jesús García Ruiz en la titularidad de la SSP. El Presidente López Obrador tiene a Rosa Icela Rodríguez al mando de la dependencia federal y ¿por qué el hoy Gobernador electo no ha de probar las faldas y zapatillas rosas en la misma área?