Matrícula a la baja en la UAS

    La población total de la UAS tiene un cambio porcentual anual promedio de -0.20 por ciento, mostrando un alarmante descenso en el número de estudiantes. Esto contrasta con el crecimiento anual de la población de Sinaloa, que es de 4.4 por ciento, evidenciando una gran brecha en la captación de jóvenes que ingresan al nivel medio superior y universitario. Este desafío requiere que la UAS adapte su estrategia para atraer a nuevas generaciones.

    Con más de 150 años de historia, la Universidad Autónoma de Sinaloa es el centro educativo de mayor tradición en nuestro estado, del cual han egresado innumerables generaciones de profesionistas que han contribuido al desarrollo de Sinaloa. Sin embargo, en los últimos años el interés por estudiar en sus aulas ha mostrado una tendencia a la baja.

    Existen tanto factores externos como internos que influyen en esta decisión de los estudiantes. Por un lado, la oferta educativa en la región se ha diversificado y ampliado; por otro, el prestigio académico de nuestra centenaria casa de estudios ha decaído, lo cual también impacta en su atractivo.

    Con base en los informes anuales de la administración pasada (2017-2021) y de la actual (2021-2025), vamos a analizar las fluctuaciones en el número de estudiantes universitarios en los últimos años. Con este fin, calcularemos el cambio porcentual anual promedio (CPAP), que representa el crecimiento porcentual promedio anual respecto al valor inicial, de la población de estudiantes de bachillerato, licenciatura, posgrado y del total de estudiantes. Este parámetro nos permitirá observar cómo ha crecido o disminuido año tras año la población estudiantil. Por ejemplo, en los últimos 60 años, el CPAP de la población en Sinaloa ha sido de un 4.4 por ciento, lo que indica un incremento anual promedio en el número de sinaloenses.

    La licenciatura presenta el panorama más crítico, con un cambio porcentual anual negativo de -1.36 por ciento. Este valor indica una disminución constante de aproximadamente el 1.4 por ciento anual en el número de estudiantes en el nivel superior, lo cual es preocupante considerando que casi la mitad de los estudiantes universitarios pertenece a este grupo (45.4 por ciento de un total de 167,995). Esta tendencia descendente resalta una problemática seria que afecta la estabilidad y las proyecciones futuras de la UAS.

    En contraste, el bachillerato muestra un CPAP positivo de 0.39 por ciento, reflejando un aumento en el interés por ingresar al sistema universitario en el nivel medio superior. Sin embargo, llama la atención que estos estudiantes no continúan hacia la universidad. Algo ocurre en esta transición que desvía a los jóvenes hacia otras opciones, y es necesario actuar para retener el interés que mostraron al iniciar sus estudios de preparatoria.

    El CPAP de los posgrados (especialidad, maestría y doctorado) es el más alto, con un incremento del 34 por ciento. Sin embargo, un análisis más detallado muestra que aproximadamente la mitad de este crecimiento proviene del área de especialidades, mientras que el doctorado contribuye modestamente. Esto sugiere que el aumento no está impulsado por un interés en la investigación científica, sino más bien por la formación en la especialidad, lo cual concuerda con reportes previos sobre la situación de la ciencia en nuestra institución.

    La población total de la UAS tiene un cambio porcentual anual promedio de -0.20 por ciento, mostrando un alarmante descenso en el número de estudiantes. Esto contrasta con el crecimiento anual de la población de Sinaloa, que es de 4.4 por ciento, evidenciando una gran brecha en la captación de jóvenes que ingresan al nivel medio superior y universitario. Este desafío requiere que la UAS adapte su estrategia para atraer a nuevas generaciones.

    Hoy, los estudiantes buscan competir en un mercado laboral cada vez más exigente. Como universidad, debemos adaptarnos a las nuevas aspiraciones de la juventud sinaloense, renovando nuestras carreras para alinearlas con el presente, donde las tecnologías del conocimiento son esenciales. Es necesario dejar atrás las carreras tradicionales que despiertan poco interés en los jóvenes de la región, como lo demuestran las tendencias actuales.

    La preocupante tendencia decreciente de la matrícula de licenciatura o la población total de estudiantes de la UAS, junto con otros indicadores de calidad previamente analizados, destaca la absoluta necesidad de replantear la visión institucional y ajustar las políticas académicas. Es indispensable detenernos y reflexionar sobre el tipo de universidad que la sociedad exige y que nuestros estudiantes merecen.

    Este es el momento de comenzar a transformar a la UAS con un proyecto académico alternativo, pertinente y adaptado al contexto social actual. Es el tiempo de consolidar un proyecto académico que nos permita impulsar una nueva visión para la UAS donde tanto profesores como estudiantes ocupen un lugar preponderante.

    eteran@uas.edu.mx

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