La necesaria renovación académica y moral en la UAS

    Haber convertido a la principal universidad pública del estado en un instrumento político y que su líder se sintiera arropado por los jefes del Cártel de Sinaloa, todo ello consentido por empresarios mudos, periodistas y comentaristas convenencieros y gran parte de la clase política, desmadejó moralmente a generaciones de estudiantes y profesores.

    Una de las tantas herencias abominables del cuenismo en la Universidad Autónoma de Sinaloa es la decadencia moral de sus autoridades, y de sus prácticas de manipulación y control sobre estudiantes, profesores y trabajadores administrativos. Incluso, podríamos afirmar, que en la UAS sobrevive un cuenismo sin Cuén a través de sus viudos y huérfanos encabezados por Jesús Madueña, su actual Rector, quien desea convertirse en el nuevo cacique de la Casa Rosalina.

    A lo largo de 20 años, Héctor Melesio Cuén y sus cófrades destruyeron el espíritu de libertad y crítica que debe existir en toda universidad y, por ende, demolieron, a su vez, la moral y la ética de la mayoría de sus integrantes.

    Como todos sabemos, la UAS fue convertida en un partido político gracias a las ambiciones de poder de Melesio Cuén, el viejo y cercano amigo de “El Mayo” Zambada, y también amigo, no sabemos hasta cuándo, de “El Chapo” Guzmán y sus vástagos. Saber hasta dónde llegó la amistad del ex Rector con los famosos capos dentro de la Universidad es un enigma, pero lo cierto es que el dueño del PAS actuaba contra sus críticos y frente a los que no se subordinaban a sus órdenes con una prepotencia propia de quien se sentía intocable e inmune debido a esa innombrable amistad.

    Haber convertido a la principal universidad pública del estado en un instrumento político y que su líder se sintiera arropado por los jefes del Cártel de Sinaloa, todo ello consentido por empresarios mudos, periodistas y comentaristas convenencieros y gran parte de la clase política, desmadejó moralmente a generaciones de estudiantes y profesores.

    El daño intelectual y ético no tan sólo a la Universidad sino al conjunto de Sinaloa ha sido enorme, al grado de que todavía no lo podemos dimensionar cabalmente. Ciertamente hay profesores e investigadores de alto nivel, y no pocos egresados que, gracias a su talento natural, carácter y dedicación, han logrado destacar en sus profesiones dentro y fuera de Sinaloa, pero, si vemos tan sólo el débil compromiso y valor cívico de miles de ciudadanos sinaloenses en los tiempos de hoy, podemos concluir que la UAS de los últimos 20 años ha tenido mucho que ver en ese deterioro.

    La persistente pobreza ética del cuenismo sin Cuén la observamos en la terriblemente desigual disputa por la Rectoría de la UAS, donde Jesús Madueña y sus huestes recurren a todo tipo de trampas y argucias -descritas magistralmente por el periodista Alejandro Sicarios en varias de sus columnas- para disminuir la fresca alternativa que representa la doctora Denisse Díaz, candidata a la Rectoría , confirman que la clica que malversó millonarios recursos de la Universidad y pervirtió moralmente a la institución superior universitaria está dispuesta a recurrir a todo con tal de seguir utilizando a la UAS.

    Por cierto, nada más para decirlo de paso, ¿ustedes creen que el PAS-UAS va a dejar pasar la oportunidad de mandar a miles de votantes para elegir jueces y magistrados que les convengan a sus intereses? Con su voto corporativo, el mismo que pretenden usar para derrotar a Denisse Díaz, van a querer depositarlo en las urnas el próximo 1 de junio.

    Vamos a necesitar muchos años para que Sinaloa recupere los mejores niveles de su capacidad productiva, en la que siempre tienen que ver los sólidos saberes de los egresados de sus universidades, y también se van a necesitar muchos esfuerzos para restañar el tejido social y moral de sus habitantes, pero un paso inmediato es apoyar la candidatura de la doctora Denisse Diaz, hija, por cierto, de una mujer extraordinaria, Chayito Quiñonez, quien desde las tareas más humildes de la universidad -como ser trabajadora de limpieza- se impulsó afanosamente hasta llegar a ser una distinguida Doctora en Derecho.

    La Universidad Autónoma de Sinaloa ya no puede seguir siendo rehén ni caja chica de nadie, tiene que recuperar la esencia de toda universidad: libertad de pensamiento para el desarrollo de la ciencia y la cultura, la formación de profesionistas capaces y comprometidos con su sociedad, y ser la conciencia crítica de su espacio y tiempo.

    Posdata

    El pasado 2 de abril se conmemoró el Día Mundial del Autismo en diferentes ciudades de Sinaloa. Una semana después, el jueves 10 a las 5 de la tarde en el Edificio Centenario, del Centro Sinaloa de las Artes, con sitio en Culiacán, presentaremos el libro “Autismo, De la Bruma a la Esperanza. Diagnóstico y avances de su atención en Sinaloa”, en el que funjo como coordinador. Los comentaristas serán el Gobernador Rubén Rocha Moya, la doctora Eneyda Rocha Ruiz (presidenta Honoraria del DIF Sinaloa) y la señora María Adriana López López (mamá de Ramsés, usuario del Centro de Atención al Autismo, CAS).

    Estamos convencidos de que esta obra hace un aporte importante al conocimiento del autismo en Sinaloa y que también será muy útil para la investigación de dicho síndrome en el conjunto del País. La amplia y reveladora encuesta que emprendieron las especialistas del CAS, dirigido por la doctora Robledo, y las entrevistas con padres de siete niñas y niños que son atendidos en ese centro especializado brindan una rica información sobre el estado y el tratamiento del autismo en Sinaloa.

    Están cordialmente invitados.