La fatal indecisión

ÉTHOS
12/04/2025 04:00
    Con filosofía más popular lo expresó José Alfredo: “lo importante no es llegar primero, sino saber llegar”.

    La vida pertenece a los decididos, no a los timoratos y pusilánimes. Claro, se deben tener disposición y cualidades, pero sin decisión no hay posibilidades de éxito. Cuando platicamos con Javier Camarena, fue muy claro en decir que algunos le llaman suerte al éxito obtenido, pero en realidad sólo acompaña a los preparados, a los que están en el momento justo y con la disposición adecuada. Claro, tampoco hay que irse al extremo contrario y aventarse como el gorras, dice un refrán. Con filosofía más popular lo expresó José Alfredo: “lo importante no es llegar primero, sino saber llegar”.

    Siguiendo con el tema de los encuentros, que ha desarrollado el papa Francisco en los mensajes de las audiencias, el miércoles 9 presentó el ejemplo de un hombre que, a pesar de tener todos los astros alineados a su favor, fue incapaz de atreverse a dar un sí decidido en el encuentro que tuvo con Jesús.

    El evangelio no nos dice quién era esa persona, nada más afirma que se trataba de “un hombre”, en el capítulo 10 de Marcos. “Se trata de un hombre que desde joven ha observado los mandamientos, pero que, a pesar de ello, aún no ha encontrado el sentido de su vida. Lo está buscando. Quizá es alguien que no se ha decidido del todo, a pesar de parecer una persona comprometida”, señaló el Papa.

    Agregó que, si hay un barco excepcional y con una tripulación maravillosa, pero no leva los lastres y las anclas que lo mantienen sujeto al puerto, jamás podrá navegar. Lo mismo sucedió con este joven a quien Jesús miró con amor. Tal vez había cumplido todos los mandamientos, pero no fue capaz de tomar una decisión, aun cuando se le miró con amor.

    ¿Soy muy indeciso?