@RubenAguilar
Animal Politico / @Pajaropolitico
Hace unos días en estas mismas páginas publiqué el artículo La ciudadanía cubana es cada vez más apolítica (28.04.23). Una académica que vive en La Habana reaccionó a mi artículo. A continuación, por su interés -ella sigue día a día lo que ocurre en ese país- transcribo el texto que me hizo llegar.
Es muy importante señalar, como lo haces, que no hay una discusión ideológica. No se piensa o se argumenta en términos del socialismo posible o el real. Solo en la cúpula se habla, no de socialismo sino de Revolución, de Fidel.
Es cierto que se ha ido un número significativo de cubanos, pero también es cierto que otros muchos que no quieren ir a ningún lado. Quieren estar aquí.
El problema central para la población es la escasez, no sólo de alimentos, que es lo central, sino de gasolina, de gas, de medicamentos (a veces si hay en los hospitales para los pacientes internos) que no se consiguen en la farmacia.
Si no fuera por la escasez, los cubanos no tienen problema ideológico con su gobierno. Cuando hablan de política solo manifiestan no estar de acuerdo con encarcelar a los jóvenes que tomaron y tomen las calles.
El tema de libertad de expresión o de reunión está muy mediatizado por la escasez. Eso es lo central en las reivindicaciones.
En tu artículo no hablas del embargo, porque no hablar de esto se ha puesto de moda, casi para afirmar que no existe.
Es un error porque sí ocurre y se advierte en las transacciones financieras, bancarias, que se convierten en un obstáculo mayúsculo para las importaciones, para los pagos a empresas no cubanas y para los flujos de capital internacional.
Hay que revisar con mucha atención lo que ocurre en Estados Unidos: los demócratas quisieran poner fin al embargo, pero aún hay corrientes anti y contra la Isla.
Ahora mismo algunos están en la idea de poner a Cuba en la lista negra de países terroristas y hacerlo ley.
Las mipymes significa un paso distinto, no sólo en el turismo, sino en el comercio y servicios. Hay que esperar para ver su peso.
En suma, esto es una realidad difícil de meterla en un molde o un modelo económico único. Observo cómo ahora tienen que convivir el capitalismo disponible y un socialismo posible.
No hay pureza ni en la intención ni en lo concreto, siempre mediatizado por una burocracia atolondrada e ineficaz, que no conoce otras prácticas y que perjudica enormemente el funcionamiento del aparato en su administración.
Lo que escribes abona a seguir conociendo esta realidad tan compleja, pero que se mueve y busca salidas.
No sabes lo que me gustaría conocer lo que ocurre y cómo ocurre en otros países que asumieron el socialismo (el que sea) en algún momento. Si conoces algún libro o curso al respecto dímelo.
Me imagino que así como no hay una única manera de capitalismo, otro tanto sucede con los socialismos. Considerando, claro está, si socialismo, dictadura, partido único tienen necesariamente que ir juntos.