La criminalización contra José Rubén Zamora y el mensaje para la prensa en Guatemala

ALTOPARLANTE
25/12/2024 04:01
    “Creo que estos dos años en la cárcel me permitieron contribuir más a que la gente en Guatemala y afuera vieran al país como es, mucho más que los 30 años que estuve en la prensa reiterando que éramos una narcodictadura que cogobierna en alianza de intereses para mantenernos secuestrados”. José Rubén Zamora
    Los procesos por lavado de dinero, obstrucción de la justicia y falsificación de documentos que enfrenta Zamora y que lo mantuvieron más de 800 días en prisión, están plagados de irregularidades, retrasos maliciosos y faltas al debido proceso.

    Este año, el día del periodista en Guatemala se conmemora en medio de una ola de agresiones contra la prensa. El 30 de noviembre busca reconocer el papel fundamental que desempeñan las y los periodistas y comunicadores en sociedades democráticas para garantizar un espacio cívico abierto. Sin embargo, pese a la llegada de Bernardo Arévalo a la presidencia, con una propuesta que prometió velar por el Estado de derecho en el mar de corrupción que azota a Guatemala desde décadas atrás, la libertad de expresión y de prensa continúa experimentando serios actos que buscan acallarla.

    Los ejemplos son diversos, pero el caso del periodista José Rubén Zamora, de 68 años, resume -en parte- el entramado de abuso judicial al que se enfrenta el gremio en ese país. La criminalización por su labor revela el círculo de impunidad que tiene sumido el llamado pacto de corruptos a Guatemala.

    Los procesos por lavado de dinero, obstrucción de la justicia y falsificación de documentos que enfrenta Zamora y que lo mantuvieron más de 800 días en prisión, están plagados de irregularidades, retrasos maliciosos y faltas al debido proceso. Al respecto, el Grupo de Trabajo de las Naciones Unidas sobre la Detención Arbitraria señaló que su privación de libertad es arbitraria, por lo que instó a su liberación inmediata. Por su parte, un grupo de personas expertas de la ONU dio cuenta de las condiciones inhumanas de las que fue víctima en prisión preventiva, como el aislamiento prolongado en una oscuridad casi constante, la privación del sueño, la desnudez forzada y registros arbitrarios de la celda.

    Después de permanecer más de dos años encarcelado durante los cuales diez abogados renunciaron a su defensa por las presiones del sistema de justicia, con el esfuerzo de su familia, del gremio periodístico de Guatemala y de organizaciones a nivel nacional e internacional, en la audiencia de revisión de medidas celebrada el 18 de octubre de 2024 un juez del Juzgado Segundo de Primera Instancia Penal decidió que Zamora podía estar bajo arresto domiciliario para enfrentar los procesos legales que tiene pendientes.

    En agosto de este año, otro juez del Tribunal Noveno de Sentencia Penal ya le había otorgado la posibilidad de estar privado de la libertad en su casa, sin embargo, para que ello se concretara era necesario que esta decisión se replicara en los casos de lavado de dinero y de obstrucción a la justicia que hay en su contra para que Zamora pudiera salir de prisión.

    La decisión de darle arresto domiciliario se sustentaba en que el periodista había superado los plazos para continuar en prisión preventiva, es decir para seguir recluido en el cuartel Mariscal Zavala mientras era juzgado y recibía su condena. Pero el destello de esperanza duró menos de un mes: el 15 de noviembre, un juzgado de apelaciones revocó esa medida.

    Este intento de regresar a Zamora a la cárcel deja en evidencia la cooptación del sistema de justicia y su uso para acallar a la prensa, lo que lamentablemente es una amenaza creciente que se está viendo también en otros países.

    En el marco del día del periodista en Guatemala es importante subrayar que el caso de Zamora no es individual, pues busca inhibir la labor periodística de quien sea que cuestione la corrupción e impunidad que afecta al país y que se refleja en otros casos de acoso judicial contra personas periodistas y comunicadoras. Su libertad, hoy más que nunca, también sería un importante precedente de respaldo y de respeto a la prensa, el estado de derecho y los derechos humanos en la región.

    * ARTICLE 19 México y Centroamérica, Amnistía Internacional, Fundación para la Libertad de Prensa (FLIP), Fundamedios, Reporteros Sin Fronteras y Protección Internacional Mesoamérica son organizaciones que defienden derechos humanos y las libertades de prensa y expresión en América Latina.

    - @article19mx Animal Politico / @Pajaropolitico