El desarrollo profesional viene acompañado de actividades y tareas que tenemos que ir enfrentando y superando día a día, lo cual muchas veces puede representar un gran reto que nos va exigiendo a cada persona hacer uso de los talentos que tenemos y buscar dentro de nosotros mismos las habilidades y capacidades para enfrentar dichos retos, pero ¿Qué podemos hacer cuando creemos que estas tareas nos sobrepasan? Sucede muchas veces que contamos con las capacidades y habilidades pero existe una cierta autolimitación que hace que nos paralicemos y que creamos que no somos capaces de hacer ciertas cosas.
Es aquí donde entramos en un proceso de autodescubrimiento en el cual entran en juego varios factores que hay que combinar para que se puedan enfrentar las situaciones que nos cuestan más trabajo y que representan un desafío mayor.
Si hacemos el ejercicio de voltear al pasado nos encontraremos con una serie de sucesos y experiencias que en su momento parecían muy complicadas y a veces hasta imposibles, pero que supimos armarnos de valor y sacar lo mejor de nosotros para salir adelante.
Hagamos uso de esas experiencias para tomar nuestras decisiones actuales de manera que sigamos aprendiendo, formándonos y avanzando en nuestro camino hacia la autorrealización.
Para mejorar esa autoconfianza es muy importante que trabajemos diariamente en nuestra formación; en cuanto más preparados estemos, más seguros nos vamos a sentir de nuestras capacidades, y podremos poner en práctica todas aquellas habilidades que hemos ido desarrollando a lo largo de nuestra experiencia y trayectoria profesional. Recordemos que la preparación nunca termina. Otro punto muy importante que nos puede ayudar en gran medida es trabajar en nuestra actitud, seamos personas que piensan y actúan de manera optimista y positiva, tratemos de ver siempre el aprendizaje que nos deja cada situación vivida, independientemente del resultado que hayamos tenido todo nos puede aportar y sumar.
Atrevámonos, esforcémonos e intentemos cosas nuevas, ya que podremos sorprendernos a nosotros mismos al descubrir que somos capaces de muchas más cosas de las que creemos, tengamos apertura para aceptar nuevos retos y vayamos siempre caminando con un propósito y paso firme, perdamos el miedo a equivocarnos, es normal que en algún punto de nuestro andar tengamos errores, pero esto nos va a permitir aprender la lección y seguir avanzando con más experiencia y más seguridad.
Por último es muy bueno el autoanalizarnos, el conocernos mejor cada día para identificar y poder estar conscientes de nuestros puntos fuertes y las áreas de mejora de manera que podamos hacer un balance positivo que nos permita y nos ayude a ir logrando y alcanzando nuestros objetivos. Trabajemos en nuestra autoconfianza, aumentemos nuestra seguridad y también de ser necesario pidamos ayuda, preguntemos, involucrémonos, y pidamos consejo, ya que muchas veces las personas que nos rodean pueden ver cosas distintas a nosotros y desde otra perspectiva, no nos auto limitemos.
Alejandra Bernal Cárdenas
Gerente de Vinculación de Proyectos
ICAMI, Centro de Formación Y Perfeccionamiento Directivo