El titular de la Secretaría de Turismo, en un pronóstico moderado prevé que la ocupación hotelera en este año en nuestro País cierre al 54.3 por ciento. Mientras tanto, en esta Semana Santa se estima que hubo ocupaciones del 75 por ciento en los principales destinos turísticos. Aunque no es posible comparar con el 2021 dadas las condiciones ante la situación sanitaria por el surgimiento de la pandemia del Covid-19, es innegable que el sector hotelero se está recuperando, y parte de su responsabilidad es continuar adaptándose a las nuevas tendencias de bienestar animal.
Con más de 200 compromisos para dejar de abastecerse de huevo proveniente de gallinas enjauladas, diferentes marcas de hoteles en todo el mundo tales como el Meliá, Club Med, Wyndham, por nombrar solo algunos, han demostrado su interés en cumplir con expectativas de los huéspedes que buscan que las empresas también consideren el trato a los animales. Sin embargo la hotelería a nivel nacional y del resto de América latina tiene aún mucho por hacer.
Las empresas hoteleras en México y el resto de América Latina pueden hacer las cosas mejores para los animales. Foto: Shutterstock
The Humane League México y el resto de las organizaciones que velamos por los intereses de los animales explotados como alimento esperamos ver que este repunte en el turismo y en la ocupación hotelera haga que los empresarios de este ramo se reinventen y se ocupen de cumplir con las preocupaciones sobre el bienestar animal, impacto ecológico y otros temas de interés de justicia alimentaria y social que tienen sus huéspedes. El estatus quo que considera a las gallinas como objetos en vez de seres sintientes y pensantes está siendo retado por cada vez más personas. Y esas personas están dispuestas a tomar decisiones de hospedaje de acuerdo a las propuestas de valor de los hoteles.
Las empresas hoteleras en México y el resto de América Latina pueden hacer las cosas mejores para los animales. Son parte del cambio que queremos ver en nuestro mundo para volverlo uno más compasivo y considerado. Nuestra región del planeta necesita de la participación de las empresas para representar de forma colectiva los intereses de quienes no se pueden defender, de quienes han vivido en silencio la crueldad de una industria alimentaria que hasta hace poco, nunca había sido cuestionada.
Afortunadamente para nosotros, quienes defendemos a los animales, tenemos algo que las grandes corporaciones no tienen y es el ánimo y voluntad de cada vez más personas que quieren ayudar a que las gallinas dejen de estar en jaulas. Si deseas participar en nuestras actividades puedes formar parte de nuestra red de creadores de cambio.