Hacerse responsable

    El día en que como ciudadanos cada uno de nosotr@s entienda que si pagamos impuestos tenemos el derecho constitucional y, por tanto, asumamos nuestro cargo como ciudadanos y actuemos dejando de culpar al de enfrente, no solo este país será mejor, sino nuestro municipio y estado.

    @tatclouthier

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    “El precio de la grandeza es la responsabilidad”, decía Winston Churchill, y coincido con él, dado que cuando nos hacemos responsables al 100 por ciento de algo, asumimos, por redundante que parezca, el tomar al toro por los cuernos y hacer lo que tengamos que hacer para obtener el resultado deseado. De no hacerlo así, se vuelve cómodo buscar a quién aventarle la piedra para decir, “es que yo no sabía”, o “es que tú dijiste”.

    Viene lo anterior a la mesa pues, con frecuencia, los y las mexicanas hemos sido dados a buscar responsabilizar al Gobierno, y por eso no va bien nuestro negocio, o no está la situación como debería y entonces las calles tienen baches y mi Alcalde o Gobernador roba y soy víctima de la situación, en lugar de asumir la responsabilidad que se tiene a partir del 39 Constitucional, que dice que el ciudadano es el mandante y hacer lo que se tenga que hacer para ver cómo utilizan bien mis impuestos o para a, b ó c y al asumir ese compromiso, superviso el uso de mis impuestos.

    De igual forma, cuando algo no sale bien en nuestro trabajo o en una relación, es fácil decir que el otro o la otra no hacía ciertas cosas y por eso no pudo salir el trabajo a tiempo o la relación fracasó.

    Pues no: Responsabilidad es Responder ante algo.... No pasar el mango del sartén para que alguien más lo tome y entonces sentarme a esperar. Para seguir en la definición de la responsabilidad, que según Eva Andrés es “dar cumplimiento a las obligaciones y ser cuidadoso al tomar decisiones o al realizar algo”.

    Por lo recién mencionado, les comparto que me llamó mucho la atención haber asistido a un evento en la Universidad de Monterrey, a raíz del Día Internacional de la Mujer, y que una doctora, por que así se presentó una y otra vez, y dijo que solo así se puede ser escuchada, así fue, Denise Dresser, hizo un reclamo público a mi persona, pues dice votó por el hoy Presidente de la República por que yo, y otros, la inducimos a ello y que hoy debíamos hacernos cargo.

    Vaya manera de que una persona que se dedica no solo a hacer análisis, sino a ser docente o maestra para ser más exacta, y quien da “opiniones” y hace “análisis”, se dejó manipular por una que no tiene ni doctorado (sic), y ahora exige hacernos cargo de la situación, es decir, del País.

    Olvida el personaje en mención que el voto es libre y secreto y que además es, y ha sido gracias a este gobierno, que hoy tenemos ni más ni menos que la revocación de mandato, misma que tal vez ella y muchos otros desaprovecharon para lograr sus intenciones, o quizá, y ahora tiendo a pensar en ello, lo necesitaban, pues de lo contrario no tienen a quién culpar o motivo para cobrar sus conferencias o asesorías.

    No puedo imaginar a un Tiger Woods, a las hermanas Williams, decir que perdieron el torneo porque el público no estuvo callado, o pues se les dijo que le pegaran a la bola de cierta manera y terminaron por perder el punto.

    El día en que como ciudadanos cada uno de nosotr@s entienda que si pagamos impuestos tenemos el derecho constitucional y, por tanto, asumamos nuestro cargo como ciudadanos y actuemos dejando de culpar al de enfrente, no solo este país será mejor, sino nuestro municipio y estado. Y en cuanto a nuestra vida personal, seremos más felices porque entenderemos que la dicha es asunto nuestro y que somos, en forma individual, responsables de causarla o no.