Mafe Walker, la psíquica colombiana que se hizo viral asegura que puede hablar el “idioma alienígena”.
Ella relata que, gracias a su mentora (Agatha), recordó todos sus dones psíquicos, todas las memorias que llevaba en el ADN de otras galaxias, constelaciones, las estrellas, otros planetas, y su cuerpo, toda su “data” se empezó a activar.
Existen científicos partidarios de una hipótesis llamada “panspermia”, la cual se refiere a un origen extraterrestre de la vida en la tierra. Los partidarios de la panspermia sospechan que la vida terrestre surgió gracias a una lluvia de materiales procedente de asteroides y cometas que se precipitó sobre la Tierra primitiva. Esto trajo consigo moléculas orgánicas relativamente complejas, pero sin alcanzar el sofisticado nivel celular. Sin embargo, dudo que Mafe se halla referido a esta teoría.
Mafe también afirma que su capacidad para comunicarse con alienígenas es gracias a frecuencias de sonido. “Es una frecuencia galáctica que yo emano a través de mis cuerdas vocales. Suena raro, es curiosidad, pero hay que sentirlo porque soy un puente de comunicación entre lo divino aquí en la tierra”. Mafe se describe a sí misma como un portal galáctico capaz de hablar el idioma extraterrestre.
El problema del argumento de Mafe es que el sonido viaja a una velocidad de 331 metros por segundo. El sonido se propaga de un lugar a otro siempre a través de un medio material (como el aire o el agua). En el vacío (en el espacio), el sonido no puede propagarse, porque no hay medio material. Aunque Mafe se ponga a gritar, sus “frecuencias galácticas” no serían capaces de llegar muy lejos, y mucho menos fuera de la Tierra hasta sus amigos extraterrestres.
Por último, Mafe dice poseer poderes psíquicos. Un psíquico es una persona que afirma utilizar la percepción extrasensorial (PES) para identificar información oculta a los sentidos normales, en particular la telepatía o la clarividencia, o que realiza actos que aparentemente son inexplicables por las leyes naturales.
Los poderes psíquicos no existen y aquellos que aseveran poseerlos recurren al engaño intencional o al autoengaño. En 1988, la Academia Nacional de Ciencias de Estados Unidos dio un informe sobre el tema y concluyó que “no existe una justificación científica de la investigación realizada durante un período de 130 años para la existencia de fenómenos parapsicológicos”.
Ahora que refutamos los ridículos argumentos de Mafe, surge la siguiente pregunta: ¿qué es lo que sucede en su cerebro cuando habla el “idioma alienígena”?
La “xenoglosia” es un supuesto fenómeno paranormal, que corresponde a la habilidad de poder hablar o escribir un lenguaje no familiar para un individuo. Muchas veces, la xenoglosia se utiliza indistintamente con el término “glosolalia”. De acuerdo con los lingüistas, la glosolalia es la vocalización fluida de sílabas sin significado comprensible alguno. En algunas creencias religiosas como el pentecostalismo, donde a esta práctica se le conoce como “don de lenguas”, a tales sonidos se los considera un lenguaje divino desconocido para el hablante. Estas prácticas existen desde los inicios de la cultura humana, y gracias a la ciencia, hoy en día sabemos que sucede en el cerebro de aquellos con esta peculiar tradición.
En 2006, el Dr. Andrew Newberg y colaboradores utilizaron tomografía computarizada de emisión monofotónica (SPECT, siglas en inglés) para medir la actividad cerebral de individuos con episodios activos de glosolalia. El equipo encontró que la actividad del lóbulo frontal (regula funciones cognitivas y el movimiento voluntario, entre otras) se encuentra disminuida y el sistema límbico (regula las emociones y el comportamiento, entre otros) se encuentra más activo. Esto quiere decir que los individuos pudieran realmente creer que se comunican con dios, o extraterrestres, o dioses extraterrestres; y que los sujetos no se encuentran en control de los centros de lenguaje convencionales.
Existen muchas formas de “ponerse astral”, pero si uno busca comunicarse con dioses o extraterrestres como Mafe, lo único que uno necesita es creerse su propio cuento. La realidad es la que uno se construye.