Los del partido del Presidente, continúan celebrando el triunfo electoral obtenido en el Estado de México, con el cual, consiguieron la Gubernatura de dicha entidad, y de paso, rompieron la hegemonía establecida por el PRI durante casi un siglo; lograda por el ya mítico grupo político Atlacomulco.
Los números obtenidos por la candidata Delfina Gómez Álvarez no correspondieron a las expectativas levantadas por las casas encuestadoras y por los propios patrocinadores de la nacida en Texcoco, pero triunfo es triunfo, señalan los ganadores, así sea por un punto, lo cual, es indiscutible en un sistema democrático como el nuestro; sin embargo, también hay que decir que, en este caso, el resultado no fue contundente, ni medianamente parecido al obtenido por el ahora virtual Gobernador de Coahuila, Manolo Jiménez Salinas, quien, bajo el patrocinio de la alianza PRIAN y otros, le propinó un verdadero nocaut al candidato de Morena y asociados, Armando Guadiana, al que no solo le ganó la Gubernatura, sino que también, coronó su éxito con carro completo en el Congreso local, justo el ideal del Presidente de la República para las elecciones federales del 2024.
Si los “morenos” y el propio Presidente de la República no se ven envueltos por la soberbia del triunfalismo, mucho tendrán que sopesar acerca de su operación en las recientes elecciones del estado de México, desde la elección de la candidata hasta las acciones operativas, así como el alcance de su principal activo político, es decir, el Presidente de la República, ya que la numerología electoral es un reflejo de que no están haciendo bien las cosas, a pesar del triunfo obtenido en EdoMex, y lo peor, es que la todavía indiscutible popularidad de Andrés Manuel no alcanza a impactar notoriamente en todo el país y mejor ejemplo de ello, son los resultados en Coahuila.
También hay que decir, que pese al músculo que tanto exhiben los del partido en el poder, tampoco les alcanzó para contribuir en el abatimiento del abstencionismo, cuya presencia, fue protagonista importante dentro de este nuevo proceso electoral. Es decir, no levanta la ola de entusiasmo que ellos presumen.
Delfina Gómez Álvarez, con alrededor de 30 años al servicio educativo público, ha sido Alcaldesa del municipio de Texcoco, Diputada federal y actual Senadora con licencia, primero, para ejercer el cargo de Secretaria de Educación Pública del gobierno federal y posteriormente, en un segundo intento, candidata a la Gubernatura del Estado de México, hoy virtual ganadora de la misma. Como Alcaldesa y como titular de la SEP se le señaló de varias irregularidades, algunas de ellas, comprobadas, pero sin ninguna consecuencia legal para su persona.
Gómez Álvarez iniciará su gestión el próximo mes de septiembre, es decir, los primeros pasos de su gestión coincidirán con el proceso electoral del 2024 del que saldrá el relevo de Andrés Manuel López Obrador, es decir, que el Ejecutivo federal y Morena tendrán que arropar a la nueva Gobernadora del Estado de México, para que el inicio de su gestión sea brillante, y con ello, conquistar el voto de los opositores, de otra manera, la nacida en Texcoco se convertirá en un pesado pasivo para el movimiento de la 4T.
Finalmente, en el reciente proceso electoral por la Gubernatura del Estado de México, y a lo largo del ejercicio para la elección del futuro candidato de Morena a la Presidencia de la República, tanto López Obrador como la dirigencia de su partido, están dejando constancia de que no están dispuestos a respetar las normas electorales, y que, de ser necesario, bailarán sobre ellas, el alegre zapateo tabasqueño titulado La caña brava. ¡Buenos días!