Los ciudadanos son muy certeros en lo que se proponen, porque viven la realidad cotidiana en sus trabajos y sus días. Esto les permite tener un certero criterio de las dificultades y retos a vencer, de los avances del país y disfrutar los frutos de un país con democracia para todos.

    El agitado ambiente político que por largos meses permeó a la sociedad empieza a serenarse y a tomar su cauce tranquilo y alegre por parte de la ciudadanía. Se percibe un futuro promisorio en el país como resultado de la elección presidencial del 2 de junio. Hay buenos augurios en los sectores empresarial y social con el nuevo gobierno que entrará en funciones dentro de escasos tres meses.

    Se nota y se palpa un ambiente festivo en la ciudadanía. Se ve en las reformas que el presidente Andrés Manuel López Obrador ha anunciado se van a llevar a cabo para cerrar con broche de oro su sexenio. Han sido recibidas con entusiasmo y se prevén buenas condiciones para que salgan avante sin ningún contratiempo. En la sociedad en general se observan condiciones propicias para que las reformas a la Constitución encuentren el respaldo de las dos Cámaras del Congreso de la Unión. Eso augura un buen inicio para el nuevo gobierno que inicia el 1º de septiembre próximo. Hay euforia entre los sectores de la sociedad por el nuevo gobierno.

    El tiempo es propicio para que las reformas salgan adelante con el consenso de los Legisladores, que se encuentran, en su gran mayoría, motivados y solidarios con el gobierno de la cuarta transformación, que sigue caminado con el respaldo de los ciudadanos, que reconocen su ímpetu transformador y los cambios trascendentales que impulsa en bien de la Nación.

    Los ciudadanos celebran las soluciones a fondo para afrontar los retos del país, para detonar el desarrollo y superar el subdesarrollo. Es viable alcanzar el pleno desarrollo con bienestar e ingresar en el concierto de los países más desarrollados por esta vía democrática. Esto lo va a alcanzar el país en menos de lo que nos imaginamos: tenemos la infraestructura y los recursos humanos necesarios para dar ese trascendental paso. Hay bases económicas para lograrlo, no lucubramos tenemos los elementos que nos dan certeza en lo que anotamos.

    En el actual sexenio de gobierno realizó una obra histórica en infraestructura, que va a dar un impulso económico extraordinario en todo el territorio nacional. Se retomó la construcción de infraestructura, de proyectos estratégicos para las regiones, como nunca lo vimos en los gobiernos del pasado y, mucho menos, en el periodo neoliberal que duró 36 años. Habrá continuidad de esos proyectos en el próximo gobierno. El pueblo emitió su sufragio a favor de que siga la transformación en el país. Estamos seguros que los cambios sustantivos iniciados en este sexenio van a continuar con la presidenta electa, Claudia Sheinbaum, quien sin duda va a impulsar que el país alcance su máximo desarrollo.

    Estamos absolutamente ciertos que vamos a ver cambios sustantivos en bien del pueblo, van a continuar, con mucho vigor, junto a los programas económicos, los programas de bienestar para que las condiciones de los trabajadores y de la clase media sigan mejorando. El pueblo no se equivoca, está convencido de lo acertado de su sufragio, porque eso significa que seguirá el progreso con bienestar social. Un nuevo país vigoroso está en el futuro de la ciudadanía, que marcha inhiesta al encuentro de su porvenir, con hechos claros, con resultados tangibles, con objetividad plena.

    La felicidad se palpa en el estado anímico de los ciudadanos. Este optimismo tiene sustento en lo que señalamos, en la continuidad de la política del sexenio de Andrés Manuel López Obrador con la nueva presidenta, mujer culta, patriota, demócrata convencida y comprometida a construir un porvenir vigoroso, lleno de bienestar, en primer lugar para los habitantes de este prodigioso país. La importancia de darle continuidad al proyecto regenerador, a los buenos gobiernos que velan por todos los mexicanos, sin distingo, como lo hemos venido subrayando, pronto lo vamos a corroborar con hechos, con rigurosa certeza.

    Los ciudadanos son muy certeros en lo que se proponen, porque viven la realidad cotidiana en sus trabajos y sus días. Esto les permite tener un certero criterio de las dificultades y retos a vencer, de los avances del país y disfrutar los frutos de un país con democracia para todos.

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    lqteran@yahoo.com.mx

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