En apuros 'El Químico' y también la ley. ¿A luminarias opacas, justicia a oscuras?

OBSERVATORIO
    Por más que la conseja pública diga que nunca segundos juicios políticos serán buenos, de cualquier manera, a las instituciones que se articulan para castigar ilícitos cometidos en el desempeño del gobierno les corresponde cuidar las formas, velar la ley, para no ser elásticas en sus actuaciones contra los que se burlan del orden jurídico y rígidas ante delitos ordinarios de poco daño a la sociedad, pero de sanción abusiva.

    alexsicairos@hotmail.com

    La cuestión no es que el Alcalde de Mazatlán cancele la compra de las luminarias opacas una vez que ve venir las sanciones que derivan del dictamen de la Auditoría Superior del Estado que detectó irregularidades graves en el contrato por 400 millones de pesos que le otorgó sin licitar a la empresa Azteca Lighting, el problema está en que existen actos ejecutados u omitidos que constituyen delitos. Y en que Luis Guillermo Benítez Torres mató la transparencia, se creyó intocable y de plano se burló del sistema anticorrupción.

    El político morenista más sibarita de Sinaloa, el de platillos gourmet, viajes todo pagado, fiestas para calmar la ira del pueblo, y todo tipo de goces costeados con recursos públicos, pide ahora que le sirvan frío el platillo de la impunidad, en viandas de plata. Presencien serenos, mazatlecos, el banquete reservado para el placer de los que desafían la ley, utilizan el erario para agradar a los cuates, y pisotean las garantías ciudadanas sin siquiera ruborizarse.

    Abrigado por similar esquema donde el ex Alcalde de Culiacán imaginó el fuero como charola de inmunidad, “El Químico” ha transitado casi cuatro años riéndose a carcajadas de la sociedad que lo llevó al cargo y que le dio el voto no a él sino a Andrés Manuel López Obrador, hasta llegar por sí mismo al punto en que la 64 Legislatura está en el dilema de someterlo al Estado de derecho o equilibrar el sistema de castigo y recompensa ofreciéndole a Jesús Estrada Ferreiro la conveniente disculpa y reinstalarlo como Presidente Municipal.

    Es que, en la opinión pública mazatleca y del resto de Sinaloa se generaliza la idea de que los aparatos de procuración e impartición de justicia, y el Legislativo y Ejecutivo, ya entraron a la necesaria dinámica de que servidor público que se aparta de la Constitución y leyes emanantes, deberá pagar las correspondientes consecuencias penales. Guardar cuando menos las apariencias no obstante que sea retomada la vieja patraña moral que reinó en los chiqueros priistas y panistas: hay que ser cerdos, pero no tan trompudos.

    La sorna continúa de parte de Benítez Torres al declarar que le cancelará el contrato a su proveedora favorita por la compra de 2 mil 139 luminarias para el alumbrado público por un monto de 400 millones de pesos. Ahora sí procede a limpiar la cloaca a toda velocidad llevando al terreno del cinismo la certeza de que desde Palacio Nacional lo blindarán otra vez para que vaya por la función pública desbaratando a patadas el sistema de justicia.

    Cree que lo van a gratificar por pegarle duro a la piñata de la transparencia, y quebrarla. De ser así, ahí está también Estrada Ferreiro listo para olvidar la embestida punitiva en curso con tal de que le permitan volver al despacho principal del Ayuntamiento, tras haber entendido la lección reformatoria que lo trasmutó del autoritarismo a lo correctamente político. ¿Estamos ante un modelo de legalidad que consuela al niño llorón regresándole la golosina que se había robado?

    Mucho cuidado con que las fiscalías, legisladores y juzgados dejen pasar este precedente de escarnio a la rendición de cuentas y también al paquete de delitos de diferentes índoles, porque de la impunidad derivará la moraleja de que en Sinaloa la ley se aplica sólo a los políticos huérfanos de padrinazgos en las altas esferas del poder, o bien a aquellos que son considerados non gratos para el gobierno en turno. No olvidemos que la historia convierte las excesivas y repetitivas tolerancias en frustraciones sociales que hasta hoy han sido zanjadas de manera pacífica, mediante el voto electoral.

    La ASE está obligada por la normatividad interna a evitar el trato diferenciado donde unos servidores públicos sean consentidos como hijos y otros maltratados como entenados. De acuerdo a lo dicho por “El Químico” el órgano auditor le entregó un informe preliminar que le da tres días para subsanar las irregularidades, lo cual le permite limpiar el expediente antes de que llegue a la Comisión de Fiscalización del Congreso del Estado. ¿Existe la operación de alto nivel para que cruce el pantano de las luminarias opacas con todo el plumaje enlodado? Híjole, no vaya a malpensar la ciudadanía que a Estrada Ferreiro lo manejaron como hijastro.

    Por más que la conseja pública diga que nunca segundos juicios políticos serán buenos, de cualquier manera, a las instituciones que se articulan para castigar ilícitos cometidos en el desempeño del gobierno les corresponde cuidar las formas, velar la ley, para no ser elásticas en sus actuaciones contra los que se burlan del orden jurídico y rígidas ante delitos ordinarios de poco daño a la sociedad, pero de sanción abusiva.

    A ver si no resulta que al presunto culpable, “El Químico”, no le quiten el sueño las múltiples denuncias acumuladas en su contra, y sean las instancias ministeriales, judiciales, fiscalizadores y legislativas las que estén en el aprieto de sacar ileso al Alcalde de Mazatlán de esta coyuntura sin que pague por violentar leyes y aparatos anticorrupción. Pobre sociedad mazatleca si las cosas resultaran así.

    Reverso

    “El Químico” es posible,

    Que en sus carcajadas prosiga,

    Hasta que le duela la barriga,

    Por la sanción tan risible.

    Renovación o cacicazgo

    Hoy se realiza la elección para decidir quién se queda con la Secretaría General de la sección 44 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Salud. Si Arcelia Prado, la actual dirigente, amplía el “arceliato” cuatro años más aparte de los 13 que lleva en el cargo, o si aún en la dispersión del voto que significan cuatro planillas opositoras, pulverización de contrincantes en la que operó el Gobierno y el Congreso del Estado, el SNTSA 44 recibe la oportunidad del nuevo liderazgo que, al menos, refresque la vida gremial cuando el cacicazgo calcina todas las esperanzas.