Cuando un servidor público no hace lo que tiene que hacer y es negligente no solo genera fallas en el servicio que debe prestar, sino que también puede generar que el gobierno para el que trabaja tenga que pagar dinero a consecuencia de la negligencia.
Y para muestra un botón: El ayuntamiento tiene que pagar multas millonarias porque no cumplió con las órdenes de jueces federales dictadas en juicios de acciones colectivas atendidos por mi despacho.
El SAT está loco de contento cobrando esas multas millonarias cuando ese dinero pudiera servir para aliviar la enorme carga financiera que le dejó “El Químico” al actual Alcalde.
El Ayuntamiento hizo lo que pudo para tratar de quitarse de encima esas multas millonarias pero ningún camino legal le funcionó.
Lo que sigue, y es lo que debe hacer el actual Alcalde, es voltear a ver quiénes son los responsables de que el Ayuntamiento tenga que pagar esas multas millonarias y le pida a la Síndico Procurador (SP) que presente las denuncias por faltas administrativas graves o no graves ante el Órgano Interno de Control o ante la Auditoría Superior del Estado.
Y si la SP descubre que, además de faltas administrativas se cometió algún delito, deberá presentar la denuncia correspondiente ante la Fiscalía General del Estado.
No es justo que, teniendo tanta necesidad de dinero, el Ayuntamiento ande pagando millones de pesos por multas impuestas a consecuencia de la negligencia de algunos servidores públicos.
El Alcalde debe dar las instrucciones necesarias para que ese dinero se recupere y lo reembolsen al Ayuntamiento los culpables de las multas.
Si no lo hace estará fomentando la impunidad y encubriendo a los responsables, contradiciendo lo que ha dicho a los medios.
En lo personal creo que el actual Alcalde tiene ganas de hacer bien las cosas y confío en que se dará cuenta de que hay culpables de las multas millonarias impuestas y hará algo para que se les castigue.
Si lo hace estará cambiando las cosas y enviando un claro y contundente mensaje de que no se tolerará que por servidores públicos negligentes se pongan en riesgo las finanzas municipales.
Ya basta de pagar y pagar por culpa de otros, ahora es tiempo de cobrar lo que se ha pagado y sancionar a los responsables.