El éxodo ecuatoriano y su paso por Sinaloa

ENTRE COLUMNAS
25/09/2023 04:03
    omar_lizarraga@uas.edu.mx
    La migración irregular de ciudadanos ecuatorianos ha tenido un repunte en los dos últimos años. Al analizar las estadísticas que ofrece el mismo INM, tenemos que, en el año 2022, hubo un registro de 22 mil personas provenientes de ese país sudamericano, y de enero a julio del 2023 se registró un total de 30 mil 252 ecuatorianos. Es decir, hubo un incremento casi del 7 por ciento de un año a otro. Pero esto no ha sido siempre así, en el año 2021, se registró a 1,384 ecuatorianos en tránsito por México y tan sólo 390 en el año 2020. Es decir, se trata de un flujo migratorio explosivo y muy reciente.

    Como parte de una comitiva de la Comisión Estatal de Derechos Humanos, en días recientes visité el Centro de Asistencia Social para Migrantes de Sinaloa, cuyas instalaciones fueron inauguradas este año en Mazatlán.

    Este centro se encarga de canalizar y dar atención a las niñas, niños y adolescentes (acompañados y no acompañados) que se encuentran en condición de migrantes irregulares en tránsito por la entidad. El personal, además de dar asesoría legal en procesos migratorios, les otorga atención médica, psicológica, de trabajo social y administrativa.

    Me sorprendió que, desde su fundación, la nacionalidad más significativa de sus hospedados es la de origen ecuatoriana, puesto que las corrientes migratorias por Sinaloa en los años recientes han sido provenientes principalmente de Honduras, Guatemala, Venezuela y Haití.

    Al llegar a casa ese día, revisé las estadísticas del Instituto Nacional de Migración (INM), y encontré que efectivamente en el presente año 2023, la migración irregular en México sigue siendo principalmente de esas nacionalidades, pues de enero a julio de este año fueron presentados ante una autoridad migratoria 87 mil venezolanos; 50 mil hondureños; 35 mil guatemaltecos y poco más de 9 mil salvadoreños.

    Pero también es cierto que la migración irregular de ciudadanos ecuatorianos ha tenido un repunte en los dos últimos años. Al analizar las estadísticas que ofrece el mismo INM, tenemos que, en el año 2022, hubo un registro de 22 mil personas provenientes de ese país sudamericano, y de enero a julio del 2023 se registró un total de 30 mil 252 ecuatorianos. Es decir, hubo un incremento casi del 7 por ciento de un año a otro. Pero esto no ha sido siempre así, en el año 2021, se registró a 1,384 ecuatorianos en tránsito por México y tan sólo 390 en el año 2020. Es decir, se trata de un flujo migratorio explosivo y muy reciente.

    Este éxodo ecuatoriano podemos explicarlo debido a los factores de rechazo que “empujan” a su población al extranjero. La falta de oportunidades laborales, la pobreza y la violencia de los últimos años han sido los principales factores que la impulsan.

    La prensa internacional ha dado cuenta de la alarmante inseguridad que aqueja a este país sudamericano. Y los cárteles transnacionales de la droga, han sido pieza fundamental de la violencia que este país jamás había experimentado. El reciente aumento del crimen y la violencia ha tenido su máxima expresión con el magnicidio del candidato presidencial Fernando Villavicencio a pocos días de las elecciones.

    Ahora bien, las familias ecuatorianas que se ven obligadas a dejar su país de manera irregular tienen que transitar por Colombia, y después atravesar la peligrosa selva del Darién, que divide a Colombia y Panamá, también conocida como el “tapón de Darién”. Esta es una de las fronteras más peligrosas del mundo, porque es un territorio inhóspito controlado por narcotraficantes, grupos guerrilleros y mafias traficantes de personas, que comúnmente asesinan, roban, extorsionan y violan sexualmente a las personas que transitan por aquí. Sin mencionar las inclemencias del tiempo y los peligros naturales a los que se enfrentan.

    Para evitar el cruce por la selva, algunos migrantes optan por cruzar por el mar Caribe, pero para los migrantes indocumentados es una opción que se descarta. Muchos lo han intentado en embarcaciones improvisadas, lo que ha resultado en decenas de naufragios.

    Los ecuatorianos que logran llegar a territorio mexicano, antes de llegar a la frontera con Estados Unidos, aún tienen que lidiar con la delincuencia común y organizada que controla las rutas migratorias. Huyen de la violencia de su país, y lo más probable es que también se conviertan en víctimas en territorio mexicano.

    Es cuanto....