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"OBSERVATORIO"

"El autodestape de Sergio Esquer Peiro. Aspiración desde la cancha ciudadana"

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OBSERVATORIO

    alexsicairos@hotmail.com

     

    Emerge de manera espontánea en la escena política de Sinaloa el agricultor Sergio Esquer Peiro con la aspiración de ser Diputado federal por el quinto distrito electoral con sede en Culiacán, planteando desde la plataforma ciudadana un México más libre y más justo con verdadero estado de derecho. Intenta el salto del surco y la actividad empresarial al Palacio Legislativo de San Lázaro, como brincándose las trancas del establishment partidista donde las buenas intenciones y perfiles cada vez tienen menos cabida.

    El factor sorpresa, bien manejado y cronometrado en la coyuntura comicial, coloca a Esquer Peiro al alcance de la partidocracia o de la acción cívica, según les convenga a las siglas o a los electores. Dice presente en el contexto perfecto donde hay poco de dónde escoger porque al culiacanense que quiere aportar a escribir una nueva historia de oportunidades y bienestar común le causa pereza tener que caminar en territorios ocupados por mafias de poder.

    Es muy probable que en diferentes puntos de México surjan talantes independientes a los cuales lo mismo el cansancio que la capacidad de aguante los ponga en la palestra electoral. Las organizaciones políticas analizan la viabilidad de acudir a trayectorias ejemplares, apartidistas de ser posible, para atender el hartazgo en los votantes que caen seducidos por la promesa de auténtica representación popular y una vez que otorgan el sufragio acaban abatidos por la traición de quienes transmutan rápido de candidatos a ingratos.

    En esa aspiración colectiva por gobiernos que no solamente den esperanzas sino que las materialicen, el ex dirigente de la Asociación de Agricultores del Río Culiacán busca el cobijo de sectores que, como es el caso del campo que de ser factor de estabilidad nacional transita a destinatario de todos los abandonos, desesperan por medidas que signifiquen la luz al final del laberinto de la incertidumbre.

    Sergio Esquer Peiro conoce la realidad desde el lado de los tenaces. Habla sin medias tintas del reto de las elecciones de 2021 consistente en establecer equilibrios en el Congreso de la Unión, contrapesos reales para moderar las decisiones riesgosas propias de regímenes que al mismo tiempo son gobierno, partido, leyes y justicia.

    Al notificarles a los productores del campo la determinación de postularse a la diputación federal del Distrito 05 sincera el propósito que lo mueve con el gran reto que tiene dicho sector ante la embestida tanto presupuestal como ideológica que enfrenta actualmente. “Pero mi móvil más importante es el futuro de nuestros hijos con un México más libre y más unido, con un verdadero estado de derecho y donde el bien común sea la premisa como fin último, lo cual lo veo cada vez más lejos”.

    Quienes no lo conocen creerán que es uno de tantos oportunistas que en el contexto de la votación del 6 de junio quiere jalar agua a su molino. Otros preguntarán por qué un culiacanense que puede llevar la vida sin sobresaltos se introduce a la burbuja de la política a punto se ser desbaratada por los pinchazos de desilusión, desconfianza y entelequias que los servidores públicos le asestan a la población sufragante. Deberían de conocerlo porque pronto les pedirá el voto.

    El asunto es que como nunca requirió de los trapecios de la política ni del saltimbanquismo ideológico, no está dentro de las conjeturas o complots que a diario se fraguan en las redes sociales. Su ámbito de esfuerzo está en la Dirección General de Grupo Chaparral, empresa líder del ramo agrícola y hortícola, en su participación en instituciones de la sociedad civil a favor de la salud, la educación y la seguridad pública o como presidente que fue de la AARC, de la Comisión de Investigación para la Defensa de las Hortalizas (CIDH) y del Consejo Para el Desarrollo Económico de Sinaloa (CODESIN).

    Tal vez el autodestape de Sergio Esquer sea el atisbo de la intensa participación política a partir de líderes de opinión o de sectores que sin partido, pero sin descartar el paraguas de siglas electorales, alcen la mano en la búsqueda de posiciones de representación social con enfoque de lucha ciudadana. Urge que el sinaloense construya desde la enorme trinchera cívica el modelo de convivencia en paz, con legalidad y progreso del que nos han privado aquellos que postulan ambiciones personales o de grupo y no empuñan la voluntad de servir.

    Sea lo que sea, la hora que está sonando en la elección de Gobernador, diputados federales y locales, así como de alcaldes, es el tiempo de la intervención colectiva para señalar las rutas hacia ese mañana tan aplazado. El momento de cerrarles la puerta a los dinosaurios de la política que una y otra vez han fallado, y darles el beneficio de la duda a intenciones y talentos nuevos que ojalá entiendan las circunstancias presentes. Ese momento marca el reloj de Sinaloa y Sergio Esquer se le adelantó un poco al minutero.

     

    Reverso

    Al ser sinaloense de labranza,

    Calcule antes de que se meta,

    Si tiene la requerida pujanza,

    Para desatascar la carreta.

     

    Sabe algo o adivina

    De tantos que buscan en Sinaloa la postulación del Partido Revolucionario Institucional a la Gubernatura, al único que ataca Sergio Torres Félix es al dirigente priista estatal, Jesús Valdés Palazuelos. Le pide que renuncie a la presidencia del PRI para que haya piso parejo, mientras él desde la Secretaría de Pesca, a la cual no dimite, realiza su luchita para suceder a Quirino Ordaz en el cargo. ¿Posee “El Morrín” Torres información privilegiada que le dice que Chuy Valdés es el “bueno”?