El miércoles 22 de mayo en Paraíso, Tabasco, el niño Dante Emiliano, tirado en las calles, después de haber sido baleado en un intento de secuestro, gritaba “no me quiero morir”. Desgraciadamente murió.
Su caso no es único ni excepcional, sino uno de los 12 mil 368 homicidios de menores de 0 a 17 años de edad que han ocurrido en este sexenio, según la Red para los Derechos de la Infancia en México (Redim).
A lo largo de este sexenio al día han ocurrido un promedio diario de 6.7 homicidios dolosos o culposos de niños y adolescentes, según la Redim.
En México los delitos contra los niños y adolescentes alcanza una impunidad del 97 por ciento, de acuerdo con la organización Tejiendo Redes Infancia en América Latina y el Caribe (Trialc).
Al asesinato de menores hay que agregar el número de las desapariciones. Las actuales autoridades mexicanas no investigan los hechos de estos asesinatos, sólo levantan el cuerpo y “están listas para el siguiente caso”.
De acuerdo con la Redim, de 2015 a marzo de 2024, 5 mil 377 personas de cero a 17 años han sido víctimas de lesiones con armas de fuego, 4 mil 436 hombres y 941 mujeres.
En los meses de enero a marzo de 2024 han sido asesinados 243 menores y de ellos 181 con armas de fuego. Un aumento del 10.4 por ciento con relación a 2023. En Guanajuato, 31; Estado de México, 28, y Jalisco, 14. En estos tres estados se concentra uno de cada tres homicidios con armas de fuego, según la Redim.
Y señala, para comparar, que en México sólo en estos tres meses son más los asesinatos de menores que los que registra en un año en un país como Israel ahora en guerra.
Entre los especialistas y los dirigentes de las organizaciones de la sociedad civil que trabajan en favor de la infancia aseguran que ahora en el Gobierno federal no existe un solo programa dirigido a la prevención de la violencia contra la niñez y la adolescencia. Y tampoco uno para abatir la impunidad.
En su versión la violencia en contra de los niños y adolescentes ocurre en el marco de un país militarizado con grupos del crimen organizado con ejércitos bajo su conducción y en muchas zonas del País coludidos con las autoridades.
Del asesinato de Dante Emiliano, el Presidente López Obrador afirmó categórico que la Oposición “lucraba” con este caso y que eso era inmoral. Así enfrenta siempre la crítica, no asume y reconoce los hechos de la realidad y actúa a la defensa. Todos están en su contra.
Los especialistas y los dirigentes de las organizaciones de la sociedad civil asumen que desafortunadamente en lo que resta del sexenio nada va a cambiar y que quien sea la próxima Presidenta o Presidente deberá dar nueva importancia al Sistema Nacional de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes ahora reducido a la nada.
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@RubenAguilar
Animal Político / @Pajaropolitico