@guerrerochipres
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La búsqueda de una pareja tiene una dinámica digital cada vez más extendida ante la cual la prevención se torna indispensable para evitar lo que se conoce como fraude amoroso.
Desde las apps o sitios web se puede construir cuidadosamente un perfil con detalles favorables y selfies en ángulo perfecto, buscar a alguien con quien haya afinidad en preferencias, enviarle un mensaje o solicitud de amistad y esperar respuesta.
Quienes recurren a este tipo de plataformas apelan a la buena voluntad y entendida sinceridad sobre la información personal proporcionada, aunque el riesgo del engaño está latente.
De acuerdo con el portal Statista Digital Market Outlook, las plataformas destinadas a establecer relaciones amorosas superaron el año pasado los 400 millones de usuarios. Tinder, una de las más populares, acumuló más de 78 millones de descargas en 2021, según App Magic.
En México, esta app registra, en promedio, 26 millones de swipes. Ese sencillo deslizamiento a la izquierda o derecha, arriba o abajo, de una barra en la pantalla ha catapultado miles de citas en línea.
Querer relacionarse con otras personas es totalmente legítimo y apropiado, pero en el camino se pueden encontrar con quien se aproveche de esa necesidad de afecto para estafar.
No es un riesgo exclusivamente mexicano, de hecho, Netflix colocó en el centro de atención la historia de Shimon Hayot, quien bajo la identidad de Simon Levi estafó a decenas de mujeres y fue conocido como “el estafador de Tinder”.
Un tema global que lo mismo puede ocurrir en Londres que en Veracruz. La prevención y el conocimiento sobre la forma de operar de estos defraudadores es central para desactivar los intentos de engaño.
Una vez que se hizo match o se aceptó la solicitud de amistad viene un proceso de enamoramiento digital; el delincuente inventa una historia de emergencia económica para la cual necesita un préstamo.
De acuerdo con los reportes de todo el País atendidos en la Línea de Seguridad y Chat de Confianza, 55 5533 5533, del Consejo Ciudadano de la CdMx, el 70 por ciento de las víctimas son mujeres, y 45 por ciento tiene entre 26 y 45 años.
En dos de cada tres casos el contacto se hizo a través de Facebook, y el resto por Instagram, Tinder y WhatsApp.
Un modus operandi ante el cual se debe estar alerta, sospechar de perfiles que tengan fotos muy cuidadas y hacer una búsqueda inversa de la imagen que permite saber si ha sido utilizada en otro contexto.
También es recomendable revisar comentarios sobre esa persona o corroborar que trabaje donde dice hacerlo. Y nunca enviar dinero ni regalos a un enamorado que no se haya conocido personalmente.
El amor en los tiempos digitales requiere prevención.
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