El agua que no alcanza

    @isaacarangureconacentoenlae
    La crisis hídrica nos alcanzó, y esto solo es resultado de muchos años de mal manejo de agua en la política pública de nuestro País.

    La crisis hídrica nos alcanzó, y esto solo es resultado de muchos años de mal manejo de agua en la política pública de nuestro País.

    Para retratar la situación a nivel nacional acá vienen unos datos que explican la problemática:

    1. El 60 por ciento de los cuerpos de agua en México presenta algún grado de contaminación, lo que afecta la disponibilidad de agua limpia.

    2. La escasez de recursos hídricos ha causado estragos en varias regiones del País, incluyendo la capital; de acuerdo con datos del IMCO, la disponibilidad promedio anual per cápita pasó de 10 mil metros cúbicos (m3) en 1960 a 4 mil en 2012. Se estima que para el 2030, la disponibilidad esté debajo de los 3 mil.

    3. Fallas en la gestión del agua. Problemas de administración y gestión de organismos como la Conagua han contribuido a agravar este problema. Como bien plantea el reportaje de Andrea J. Arratibel, 27 de noviembre del 2023 para El País, mientras que el 60 por ciento de la superficie del País sufre sequías, la Conagua, entre la falta de recursos y la mala gestión, ha contribuido a agravar considerablemente este problema.

    4. Fenómenos climáticos extremos. En datos del IMCO, en un año se presentan más de 8 mil 491 sequías, 70 por ciento de ellas de gravedad.

    5. Crecimiento urbano y demanda de agua. El crecimiento poblacional y la urbanización descontrolada han incrementado la demanda de agua, sobrecargando los recursos disponibles. Desde el 2006 a la fecha, menos municipios han tenido acceso a agua todos los días. En 2006 el 61 por ciento lo tenía, ahora solo el 33 por ciento. Y aunque el 96 por ciento de la población tiene acceso al agua, aún enfrenta desafíos en su distribución.

    6. Falta de sistemas de captación de agua pluvial. La falta de infraestructuras para captar y almacenar agua de lluvia limita la capacidad de aprovechar este recurso.

    ¿Pero quién consume más agua en México?

    De acuerdo con datos del IMCO, el 76 por ciento está en el sector agropecuario, el 15 por ciento en abastecimiento público (incluye urbano y comercio). Industria conectada directamente al recurso hídrico (autoabastecida), 5 por ciento; y termoeléctricas, 4 por ciento.

    ¿Qué pasa en Sinaloa?

    En datos que comparte Conselva, en Sinaloa ya cinco municipios presentan algún porcentaje de sequía excepcional (el nivel más grave), de estos El Fuerte y Choix son los municipios más afectados, aunque la sequía de Durango, que presenta un 40.6 por ciento de su superficie en sequía excepcional, está afectando las cuencas de los ríos que tienen origen en dicho estado y que fluyen por los municipios ubicados en el Sur de Sinaloa, Mazatlán, Concordia y San Ignacio.

    Esta alerta que lanza Conselva representa un grave riesgo para la seguridad hídrica de la región.

    ¿Qué están haciendo autoridades?

    Esta la tengo de tarea.

    ¿Qué podemos hacer ante la crisis?

    - Exigir que nuestros gobiernos mejoren la gestión de agua con políticas y programas que garanticen un uso sostenible y equitativo de los recursos públicos.

    - Desarrollar y mantener infraestructuras adecuadas para el tratamiento, y distribución del agua, así como el desarrollo de sistemas de captación de agua.

    - Participar activamente en proteger y restaurar los ecosistemas acuáticos para mantener la calidad del agua y preservar su biodiversidad.

    - Promover la aplicación de normativas ambientales para prevenir la contaminación de fuentes de agua y exigir la sanción a quienes incumplan las regulaciones.

    - Incentivar la adopción de prácticas agrícolas que reduzcan el uso de agua y promuevan la eficiencia en el riego.

    - Promover los programas de reciclaje y reúso de agua para reducir la dependencia de fuentes de agua potable.

    - Fomentar la educación sobre el uso responsable del agua.

    - Escuchar a los que saben y apoyar organizaciones como Conselva que se apoyan de información técnica para proponer alternativas sostenibles.

    No hay respuestas fáciles a problemas complejos, pero discutir estos temas y abrir nuestra atención hacia los que saben es el primer paso.

    Gracias por leer hasta aquí. Nos leemos pronto.

    Es cuánto.