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"DESDE LA CALLE"

"Dispersa andadura, para entender al sinaloense"

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DESDE LA CALLE

    El pasado martes el maestro Ronaldo González presentó su libro “Dispersa andadura” en el Centro Sinaloa de las Artes “Centenario” ante un público integrado por estudiantes universitarios, artistas, promotores culturales, intelectuales y amigos del escritor.
     
    La obra es un compendio de algunos artículos que el autor ha escrito en su “andadura” en diversas revistas como Nexos y Aldea Global. Los textos abarcan una diversidad de temas: reflexiones sobre la cultura del narcotráfico en Sinaloa, apuntes del autor sobre diferentes obras -algunas clásicas y otras contemporáneas-, y también narraciones sobre sus vivencias y afectos. La dispersión en los temas que aborda el libro lo hace aún más interesante. 
     
    Los textos que nos presenta Ronaldo tienen protagonistas muy diversos; filósofos, ensayistas, artistas plásticos, actores, economistas, historiadores, empresarios, y uno que otro ícono de la música como David Bowie. Todos, desde la pluma del autor, tienen algo que aportar para entender la situación en Sinaloa; algunos de manera directa, otros sólo contribuyendo al cúmulo de recursos intelectuales con los que González observa y nos presenta sus análisis. 
     
    Me permito citar un fragmento de “Sinaloa: ¿violenta por tradición?”, uno de los artículos que se presentan en este libro. Fue publicado en la revista Nexos el 2 de diciembre del 2016. Este análisis parte de una declaración del ex Gobernador Mario López Valdez sobre una supuesta “tradición” de los sinaloenses a ser violentos. El texto dice así:
     
    La pregunta clave se enuncia con sencillez: ¿de dónde viene esa propensión al ilegalismo y a la transgresión de las normas convencionales que caracteriza al sinaloense? Y la respuesta, mucho menos sencilla que la pregunta, se puede encontrar en la rumorosa historia (...) De entrada se impone una sospecha tan fundada como desencantadora: la sinaloense es una sociedad demediada, una sociedad que jamás ha alcanzado a cerrar sus ciclos civilizatorios. 
     
    Y más adelante argumenta:
     
    Su concepción del mundo y el tiempo es cíclica y tributaria de un romanticismo simple, identificado con la pasión más que con la razón, con la emoción más que con el pensamiento, lo que permite distinguir los rasgos distintivos de su autoasumido estereotipo. 
     
    Ante la provocación de Ronaldo, nos queda deliberar si realmente somos una sociedad demediada, con cierta propensión a actuar de manera irracional y a desafiar las normas. Para comprender nuestros comportamientos violentos irracionales e incivilizados es clave entender nuestra propia identidad sinaloense, y en ello, como propone el autor, es necesario indagar en nuestra historia y encontrar las causalidades de las particularidades de nuestra cultura. 
     
    Se presenta ante nosotros una lectura interesante, además de un desafío.
     
    @iliana_pr