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"Ecosistema"

"Culiacán, visión cero"

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    jccarras@hotmail.com

     

    Hoy no opinaré sobre lo que todos están opinando. Lo que sucedió en Culiacán el pasado 17 de octubre es para nunca olvidarlo, pero para no distraernos tanto. Personalmente, he decidido destinar mi esfuerzo a continuar con proyectos que alienten la convivencia y el respeto entre las personas y contribuir así a construir ciudadanía.

    La semana pasada fui invitado por MAPASIN al Curso de Sistemas de Movilidad Seguro para Agentes Cero impartido por Sarape Social en la ciudad de Culiacán. La iniciativa impulsa una política de seguridad vial para llegar a la envidiable cifra de cero víctimas mortales en hechos viales. Nada es imposible y pocas cosas hay tan deseables como tener una ciudad sin víctimas por hechos viales. Sobre todo, en Culiacán que es el municipio con más muertes infantiles del país en este rubro.

    Al curso asistimos alrededor de 30 personas entre académicos, iniciativa privada, sociedad civil y funcionarios de los tres niveles de gobierno. Al término del curso se formó el Comité de Seguridad Vial para Culiacán cuyos integrantes establecimos el compromiso del Manifiesto del Agente Cero, que no tiene desperdicio, por lo cual cito textualmente:

    “Creemos que la movilidad debe ser asegurada, como una herramienta de nuestra libertad.
    Creemos en diseñar la calle para las personas, todas las personas.

    Creemos en el empuje de las autoridades para mejorar su entorno, en las capacidades y visión de la sociedad civil, en la voluntad de transformación de las empresas y en los conocimientos de la academia; creemos que todos somos capaces de colaborar cuando la causa es justa y urgente.

    Creemos en el conocimiento y los datos como brújula, en una legislación pensada para todas las personas, en políticas sustentadas por datos duros y con impactos medibles.

    Creemos que los niños y niñas mexicanos merecen la misma seguridad que los de cualquier país más desarrollado. Que las personas con discapacidad tienen el mismo derecho a la calle que cualquier otra. Que las personas de la tercera edad deben poder cruzar la calle con dignidad. Que cada ciclista o peatón atropellado, pudo vivir.

    Creemos en una calle con las condiciones suficientes para que no arriesgue a nadie por el medio de transporte que elija, o por las capacidades de su cuerpo.

    Nos une una visión clara, una cifra de víctimas por accidentes: Cero. Creemos que podemos lograr esta misión”.

    Nuestra misión es actuar mediante un enfoque sistémico para propiciar sinergia en la ciudadanía. En el curso se hizo mucho énfasis en la necesidad de diluir la desventaja permanente del peatón en esta ciudad pensada para los automóviles, en bajar las velocidades y en transformar las calles para garantizar, ante todo, la vida de las personas.

    El enfoque sistémico no busca culpables, invita a observar para solucionar; prioriza siempre al más vulnerable y no se enfoca a reducir accidentes sino a evitar que la gente muera en ellos. Hay ciudades que ya lo han logrado, como Pontevedra, que luego de tener altas cifras de mortandad en hechos viales, hoy suma seis años sin contar una sola. ¿Acaso alguien se opondría a este resultado?