La semana pasada se difundieron en redes sociales tres interesantes videos que fueron motivo de debate público. Los tres, se centran en el gobierno del Presidente Andrés Manuel López Obrador y los consideramos útiles para la reflexión política, a partir de la afirmación de Walter Benjamin: “La naturaleza que habla a la cámara no es la misma que la que habla al ojo”.
El primer video se difundió ampliamente el sábado 30 de mayo. Se trata de una conversación virtual, entre Héctor Aguilar Camín y -según el subtitulado- sus viejos compañeros de preparatoria de la generación del 62.
La conversación dada a conocer, inicia poniendo en contexto del debate al historiador: “Bienvenido, Héctor... déjame hacer un resumen... ayer comentábamos algunos de nosotros el gran descontento que tenemos y que existe por la administración del Presidente López Obrador... y lo que decíamos aquí es ¿cómo le hacemos nosotros los chavos de setenta y cinco años para hacer que este descontento se vaya, se permee hacia las clases populares, hacia las clases que tienen treinta y cuarenta millones de votos?”, pregunta con voz temblorosa, uno de los veinticinco septuagenarios que aparecen a cuadro y que se disponen a escucharlo durante doce minutos en el que, con asombrosa seguridad, dibuja un escenario político y económico desastroso que servirá para “derrotar a Morena y a López” y luego en el 22 revocar el mandato del Presidente “por pendejo y por petulante”. La disertación de Aguilar Camín concluye presagiando que la popularidad de AMLO se desfondará, mientras sus interlocutores, uno de ellos en cama, responden: “Nos has dejado mudos”.
El segundo video se difundió el 5 de junio pasado y rápidamente se hizo viral. Es el primer capítulo de “Loret”, programa de Carlos Loret de Mola, que se difundirá a través de redes sociales mediante la plataforma de contenidos informativos “Latinus”, la cual se realiza en un moderno set de grabación que ayuda a posicionar el mensaje. Durante cuarenta minutos, el periodista cuestiona duramente al gobierno del Presidente López Obrador. Particularmente, el desempeño del doctor Hugo López-Gatell, subsecretario de salud federal. Loret utiliza la edición de vídeo para ir construyendo una atractiva narrativa que descontextualiza las declaraciones del epidemiólogo y vocero de la lucha contra el Covid-19. Se trata de una innovadora y efectiva estrategia que adereza con su ya típico sarcasmo, mismo que, en el mismo programa, pero en el segmento de entrevista, se observa, quizá involuntaria o tal vez cínicamente, un Loret sonriente y festivo ante las trágicas declaraciones de un par de doctores invitados que narran, en contrasentido al Gobierno federal, la tragedia de la lucha contra el coronavirus.
El tercer video se difundió en redes sociales en dos partes: la primera, el 28 de mayo; la segunda, el 4 de junio. Se titula “Y fue a Palacio. Crónica de una transformación”. Es una entrevista realizada por Epigmenio Ibarra al Presidente Andrés Manuel López Obrador. La videograbación describe “una vida de lucha que culmina con una victoria electoral aplastante. Un mandato de 30 millones de electores. Una voluntad reiterada a lo largo y ancho del país”. Mediante cortos aspectos de video, Epigmenio refleja un pueblo esperanzado con la transformación y un Presidente cercano a la gente que camina por lugares públicos con naturalidad. Luego, lo invita a recorrer Palacio Nacional. El Presidente lo lleva a sitios simbólicos. Uno de ellos “La intendencia de la traición”, lugar donde estuvieron presos el Presidente Francisco I. Madero y el vicepresidente José María Pino Suárez, antes de ser cobardemente asesinados, mientras reflexionan sobre el papel del ejército en la actualidad y la lealtad que tienen hacia las instituciones del Estado mexicano. Luego lo invita a pasar a la sala “Los Olvidados”, dedicada a dirigentes sociales y políticos casi olvidados como Las Soldaderas, Carmen Serdán, Sólon Argüello, Felipe Ángeles o Heriberto Jara.
Ahora bien, la breve descripción de tres materiales visuales difundidos ampliamente por sus generadores, que ruego al lector consuma y analice, es la afirmación de que la política es también cultura mediática en el que se construyen imaginarios colectivos y se configura eso que llamamos “poder”.
Aguilar Camín, construyó un mensaje hiper segmentado. Loret, presentó sólo a una de las partes. Epigmenio, tal vez al estilo de Bertolt Brecht, contó una historia para entender las dinámicas sociales. Hizo crónica para pensar y no sólo para sentir.
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