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Seguramente Usted ya escuchó sobre la manifestación del próximo lunes 9 de marzo “Un día sin nosotras”, (salvo que sea el Presidente) es muy probable que ya hace días que se enteró y sabe que se está convocando a un paro nacional feminista, en el cual todas las mujeres participen, incluso hay instituciones educativas que ya se han sumado como la UNAM, el Tecnológico de Monterrey, ITAM, Ibero, entre otras, han señalado que aquellas alumnas o trabajadoras de dichas instituciones educativas pueden faltar sin que esto les afecte en sus clases o labores respectivamente.
En el ámbito jurídico el Consejo de la Judicatura Federal determinó que el 9 de marzo sea laborable pero inhábil, es decir que no se computará para la cuestión de términos, y el Supremo Tribunal de Justicia del Estado de Sinaloa acordó que se respetaría la libre decisión de las servidoras judiciales para participar en dicho movimiento, sin necesidad de justificar su inasistencia. En el caso de Gobierno del Estado, el Gobernador a través de su cuenta de Twitter señaló que las mujeres de su administración contaban con su apoyo y solidaridad, así que creo que no tendrán problema si deciden no asistir. En el caso del Ayuntamiento de Culiacán pues quedémonos con que dice que lo apoya.
La protesta es una invitación a las mujeres de nuestro País a que suspendan su día a día cotidiano (laboral, académico, extracurricular), tampoco realicen compras y si es posible no se hagan presentes en redes sociales, esto con la finalidad de demostrar el gran impacto que tienen tanto económico, estudiantil, cultural en el día a día y obviamente protestar por el creciente número de feminicidios que ocurren en nuestro País.
Aclaro que estoy en un terreno peligroso, ya que como hombre no puedo sentir o entender el nivel de inseguridad o desventaja en la que se encuentra por su sola condición de ser mujer, pero sí puedo sentir empatía y sobre todo preocupación, ya que afortunadamente tengo madre, esposa e hijas y si algo le pasara a alguna de ellas exigiría justicia por sobre todas las cosas.
Usted puede pensar que también le suceden cosas malas a los hombres y estará en lo correcto, el problema es que a los hombres les (o nos) pasan cosas malas no por ser hombres sino por alguna otra situación. Claro que entiendo que hay personas malas independientemente de si son hombres o mujeres, pero esto no significa que estemos en igualdad de condiciones (en cuanto a seguridad o ser discriminados por nuestro género).
En redes sociales se ha promovido mucho un ejercicio que puede ser útil para entender la situación, el cual consiste en que ponga un nombre femenino y enseguida la palabra hallada, en mi caso utilice el de María y encontré lo siguiente: “María Elena, una mujer de la tercera edad fue violada y…”, “En Sonora hallan a estudiante reportada como desaparecida”, “Buscaban desesperadamente a María, fue hallada muerta en..”, “Camila María Concepción hallada sin vida tras suicidarse” y el último que pondré “Hallada muerta la niña de 6 años desaparecida en Colima”, posteriormente hizo lo mismo con mi nombre y encontré “”Historia, hallan las ruinas del templo de Salomón…”, “Mesa de Salomón”, “Preguntas de los lectores biblioteca en línea”, David y Salomón, los reyes de la polémica”. Usted podrá pensar que mi nombre es bíblico y por eso tanta referencia a la Biblia y/o al Rey Salomón, ¿Pero acaso María no?
Este 9 de marzo, nosotros los hombres, aparte de respetar el movimiento, podemos utilizarlo para hacer referencia a nuestro actuar como hombres, en nuestro día a día, a la manera en que fuimos educados y, si es el caso, la manera en la que estamos educando a nuestros hijos.
Aquí tengo que hacer una aclaración, hace ya algunos meses de una marcha en la que se hicieron desmanes (se pintaron monumentos, quebraron vidrios) y mi primera reacción fue descalificarla, pero luego pensé ¿que haría yo si no fuera escuchado, si no fuera atendido por que algo le sucede a mi madre, esposa o alguna de mis hijas? ¿Qué haría Usted? Antes de contestar le comento que conocí a través de redes sociales el caso de Yesenia Zamudio, madre de una joven asesinada en el año 2016, la cual, según su versión, su hija fue agredida y aventada desde la ventana de un departamento por un profesor y tres compañeros de su universidad; las autoridades primero clasificaron estas acciones como un suicidio para posteriormente clasificar su muerte como feminicidio. A la fecha no hay avances ni personas detenidas. Busque el video en donde la propia señora Yesenia explica su actuar y su sentir.
Seguramente habrá quienes quieran capitalizar políticamente este movimiento, pero eso no debe ser suficiente para desestimarlo, mucho menos dejar de apoyarlo.
PD 1. La Cámara de Diputados aprobó aumentar las sanciones de la violencia familiar, sí, claro, eso la detendrá.
PD 2. Lo prometido es deuda, desde aquí una felicitación a los “Chairros” (equipo de softbol) por su campeonato, ok no, primera victoria en la liga.
PD 3. Descanse en paz el señor Alejandro Armenta Soto, agradecido (entre otras cosas) con sus palabras hacia este espacio y mi persona.
