"Semana Santa en Los Mochis, tierra Yoreme"
MÉXICO._ Los Mochis es tierra yoreme, explica Marco Antonio Amarillas, presidente de la Asociación de Hoteles del Norte de Sinaloa. Y la fiesta indígena de Semana Santa es uno de sus rituales de mayor colorido. Puede ser presenciada por los viajeros que visitan esta región del país.
La tradición indígena inicia el Miércoles de Ceniza, cuando las cofradías de danzantes y músicos yoremes -los llamados judíos o fariseos- se reúnen en las comunidades para visitar las casas que comparten la tradición.
Estos hogares muestran en su fachada una cruz de madera, símbolo de la cultura mayo-yoreme. Llegan bailando a ritmo de los tambores y al pie de cada cruz se les deposita comida.
Cánticos y danzas, que en tiempos prehispánicos convocaban a la guerra, hoy son parte de este ritual religioso. Durante toda la cuaresma es muy común encontrar por las calles de Los Mochis a estos danzantes contagiando a la población de alegría, con su música y danza.
La Semana Santa indígena yoreme es uno de los acontecimientos más importantes y floridos del grupo mayo-yoreme del norte de Sinaloa.
Durante esta celebración también se recrea la Pasión y muerte de Jesucristo, pero de una manera muy particular, en la que se distingue con claridad el sincretismo religioso, pues se manifiestan elementos totémicos prehispánicos mezclados con aspectos de la Iglesia católica.
La fiesta mayor, cuenta Marco Antonio Amarillas, inicia el Domingo de Ramos y continúa hasta el Domingo de Pascua.
En el primero, desde muy temprano los judíos se reúnen para organizarse para la adquisición de palma fresca que llevarán hasta el templo de Mochicahui para su bendición.
También los pueblos circunvecinos participan de este ritual, algunos alcanzan a tomar palma bendita que llevan a sus hogares para hacer cruces y conservarlas para proteger a sus familias y hogares de posibles males y maldiciones.
El Miércoles Santo aparecen de nuevo los judíos por la noche y pernoctan en la Iglesia de Mochicahui o en sus alrededores. Por la mañana del jueves todos los judíos salen a tumbar cruces y regresan por la tarde, lo mismo que en Viernes Santo.
En estos días visitan todos los hogares indígenas a los cuales acudieron viernes tras viernes.
El Sábado de Gloria, los judíos, encabezados por un pascola, cantan gloria. Los judíos en este día no llevan la máscara, sólo un pañuelo con el que se cubren la cara, y queman al judas, un muñeco con la cara de algún habitante de la comunidad yoreme.
Durante esta celebración se hacen presentes las danzas del pascola y del venado, lo que permite mantener vivo el espíritu del pueblo mayo-yoreme.
