"Moneros 'culichis' en París"
CULIACÀN._ "Con el apoyo de Ito Contreras, de Culiacán, Sinaloa, México" es el mensaje escrito en la portada de la revista La Locha fue colocado en un altar ubicado en el Bulevarchard Lenoir, en París, junto a decenas de frases más, que en diferentes idiomas expresan solidaridad con los ocho periodistas del semanario Charlie Hebdo, asesinados el 7 de enero en un ataque terrorista.
Ito deja el ejemplar, y junto a dos moneros más de Culiacán, Ricardo Sánchez Bobadilla y Arturo Vargas, el Avecé, camina unos pasos hasta la calle Nicolás Appert con la intención de entrevistarse con personal del semanario que sigue creando cartones satíricos, uno de los cuales motivó el atentado.
Llega hasta un edificio con grandes ventanales y de aspecto deteriorado, donde se ubican las oficinas del rotativo, pero el lugar está acordonado y custodiado por policías. El personal de Charlie Hebdo fue trasladado a otro lugar.
"La idea de nosotros era mostrar solidaridad con ellos, un apoyo y lo que hicimos fue dejar una ofrenda..., donde la gente deja sus mensajes, dejamos unas revistas y les dedicamos un apoyo, para que sepan que no están solos, que cartonistas de un lugar tan lejano, que a lo mejor ni siquiera hacen en el mundo como Culiacán".
El viaje de más de 9 mil 281 kilómetros a París de los tres moneros, añade, fue en defensa de la libertad de expresión, que en Sinaloa y México se ejerce a medias.
"Aquí no hay ninguna garantía, en Sinaloa igual que en México, no hay ninguna garantía, por lo general los periodistas son los más amolados en esos asuntos, por ejemplo el de la radio no tiene ningún seguro, ni de vida, ni seguro social, no tienen ninguna prestación, y en los medios impresos está más o menos en el asunto, pero en el resto no hay nada", manifiesta.
"Son periodistas desprotegidos totalmente, y no hay seguridad en tu medio, menos tienes de la otra, y lo peor del caso es que el periodista es la voz de la sociedad, lo que esa masa no puede decir, nosotros lo decimos....".
En Francia, añade, el ataque a Charlie Hebdo generó movilizaciones y protestas, mientras en México hay un desinterés de la sociedad y de las autoridades ante las agresiones a periodistas.
"Ni siquiera el gobierno ha podido resolver los que trabajan dentro digamos, que trabajan con ellos mismos, ni siquiera se ha resuelto esa parte, los crímenes de funcionarios públicos no se han resuelto, ni se van a resolver", manifiesta.
"Allá los gobiernos protegen mucho la libertad de expresión, y aquí yo veo un desinterés por parte de la sociedad y del gobierno...".
En las calles parisinas, donde la Torre Eiffel sobresale de entre los edificios, decenas de plantillas, grafitis, y hasta murales, recuerdan los rostros de los periodistas asesinados.
"En el altar había cajas de madera, veladoras, flores, mensajes, la gente llega y deja una carta, y alguien hizo unas pinturas chiquitas de cada uno de los cartonistas que murieron y las fueron pegando en las esquinas", menciona.
"De hecho hay una pared enfrente del edificio, donde hicieron un mural y hay una obra de dos angelitos con la cara de los cartonistas, y otros hicieron plantillas y grafitearon por todos lados, como muestra de apoyo, porque allá la gente va y da su apoyo, y eso se me hace muy interesante".
El autor de La Granja, el cartón que se publica los domingos en Noroeste, menciona que los monos son una oportunidad para abordar cualquier tema desde un punto de vista gráfico.
"El Charlie Hebdo toca temas que tienen que ver con asuntos de su cultura, como del Islám, el Papa, los temas religiosos y toca temas políticos, ecológicos, pero es la cultura de ellos", dice.
"Nosotros tocamos otros temas, el narcotráfico por ejemplo, lo tocamos mucho, la política y son cosas diferentes, allá el tema religioso es muy importante, porque ellos están muy cerca de muchos asuntos religiosos".
En sus cartones menciona que aborda temas de interés, pero con ética y responsabilidad.
"Yo tengo un código de ética, y yo cada vez que hago un cartón trato que me respalde una nota, no puedo hacer un cartón que no tenga un respaldo de una nota publicada, y no me meto con asuntos personales... sólo con lo que tenga que ver con recursos públicos, hasta ahí me puedo meter", manifiesta.
"El cartón se supone que es una granja donde hay muchos animales, y esos animales es como un reflejo de la sociedad... el personaje principal.. es un osito que es como tratar de hacer un poquito de humor negro, porque es ingenuo, pero a la vez sin querer te dice las cosas como son, y tengo al diputado que es un burro, que a veces trae un elote en la mano, porque está maiceado... y ahí abordo política y a veces toco algunas problemáticas de la ciudad".
En su viaje a Europa, que incluyó Barcelona y Londres, comenta que constató que el género del cartón tiene mayor mercado que en México, con revistas totalmente dedicadas al género.
"Me encanta el cartón porque siempre he dicho que soy un ciudadano, más que un periodista,... yo me pongo en el papel del ciudadano, y digo esto es lo que yo quisiera decir como ciudadano, porque el cartón al final es un género periodístico, es la opinión de quien lo hace".
Para hacer un diario de viaje, Ito hizo una caricatura suya, la cual aparece en las fotografías que tomó en los lugares y sitios más emblemáticos de las ciudades que visitó, y la cual le facilitó el paso en dos aduanas.
"Hice la caricatura porque de alguna forma tengo que hacer un diario de viaje, y no quería salir en las fotos, y a veces la guardaba en la bolsa de la camisa o se quedaba en el pasaporte", dice.
"Al llegar a una aduana y me piden el pasaporte, adentro venía mi caricatura y cuando la ve el de la aduana me dice, 'ahh es usted, pásele, pásele', y al final me ayudó en dos aduanas para que no me hicieran tantas preguntas".
"Allá los gobiernos protegen mucho la libertad de expresión, y aquí yo veo un desinterés por parte de la sociedad y del gobierno...".
"La idea de nosotros era mostrar solidaridad con ellos, un apoyo y lo que hicimos fue dejar una ofrenda...".
Ito Contreras
Caricaturista