Violencia familiar y burocracia

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Llama la atención que la Coordinación General del Consejo Estatal de Seguridad Pública haya hecho hincapié en que los órganos autónomos, pero que trabajan con dinero público, se pongan a trabajar para mejorar la situación de la lucha contra la violencia familiar en Sinaloa.

Esto ocurrió en la última edición de Ciudadanos Evaluando, una herramienta de análisis de la incidencia delictiva en Sinaloa.

Resulta que la violencia intrafamiliar mostró su peor cara durante la pandemia y se pudo observar la mayor cantidad de denuncias en un mes, una cifra nunca antes vista en los últimos 10 años.

Esto coincide con la segunda recomendación que emitió la Comisión Estatal de Derechos Humanos, hecha pública la semana pasada, en la que pudo acreditar cómo la propia directora del DIF Badiraguato ignoraba todo los protocolos para mediar entre una mujer víctima de violencia y sus agresores.

El asunto de estos órganos, desde los institutos locales de las mujeres, ya de plano ignorando al estatal y la manera en que han permanecido calladas, hasta el Cepavif y Sipinna, hagan más maromas, se toman más selfies y regalen más camisetas que buscar de verdad atacar el problema.

Ahora el CESP, ya rendido, pide ayuda al gobierno federal para que aterricen alguna estrategia en el estado.

Eso sí, sepa usted que aunque haya un desmadre en los hogares sinaloenses y sus calles, contra las mujeres y las familias, ellas siguen cobrando el cheque.

Deberían hacer una reflexión de verdad y renunciar si no son eficientes en sus cargos para darles espacio a nuevos equipos que sí quieran hacer por lo menos el intento de mejorar la situación.

Secretario en campaña

Hace no mucho, el Gobernador Quirino Ordaz Coppel declaró que no permitirá el uso de recursos públicos para que algún integrante de su gabinete ande haciendo caravana con sombrero ajeno.

Para evitar que los funcionarios alimenten sus negras intenciones electorales, y sí, estamos hablando del flamante Secretario de Pesca y Acuacultura, Sergio Torres Félix.

Pero por mucho que lo diga el Gobernador, lo cierto es que su funcionario está usando de catapulta su puesto estatal para tratar de posicionarse con los pescadores y líderes de los mismos.

En la reunión que sostuvieron los integrantes del gremio pesquero y Ordaz Coppel se coló Torres Félix quien buscó mil oportunidades de figurar en la foto, pero nomás dejó en evidencia que ni siquiera el Gobernador se paró a esperarlo ya que iba muy campante con el Secretario de Hacienda, Arturo Herrera.

¿Será que si se logra el subsidio al diésel por medio de dicha reunión, el ex Alcalde de Culiacán buscará anotarse dicha victoria?

El Gobernador debería poner un tope, separarlo de su cargo o dejar los puntos claros, porque al parecer, Torres no entiende un “no te queremos” por respuesta.

Todo en veremos

El Secretario de Salud Efrén Encinas Torres ya anunció, que según él es un veremos, que en octubre Sinaloa pasaría a color amarillo en el Semáforo Covid, pero qué tan cierto es que esto pueda determinarse, no lo sabemos.

La Secretaría de Salud tiene en abandono y con telarañas los reportes epidemiológicos que deberían emitirse a diario, que desde el 31 de agosto están sin actualizar.

Esto deja ilocalizable la información y el seguimiento que le puedan dar los ciudadanos a los datos de la pandemia y a expensas de lo que digan las autoridades.

Pueden afirmar que todo está bien o que el panorama está favorable para Sinaloa, pero no hay quién les pueda dar la contraria si le ocultan la información a la ciudadanía.

Y si no la están escondiendo ¿qué pretexto van a poner para no mostrar las cifras de ocurrencia del coronavirus en la entidad?

Definitivamente, no le pueden echar la culpa a las capturistas.

Tres volados muy caros

Mario Zamora Gastélum, Senador del PRI, se sumó a las voces que están en contra de destinar tantos recursos a las obras insignias de Andrés Manuel López Obrador, como el Tren Maya, la construcción del nuevo aeropuerto de la Ciudad de México y la refinería de Dos Bocas, en Tabasco.

Es bien sabido que la oposición, en muchas ocasiones, critica hasta si el Presidente respira, todo les molesta, pero en este punto, ¿realmente son necesarias y prioritarias estas obras para México?

La respuesta nadie la sabe, la podemos intuir, pero la verdad es que no se ve que esto tenga un buen desenlace.
Lo menos arriesgado podría pensarse que es el aeropuerto en la Ciudad de México, esta es una obra necesaria pero no costaría nada barata, se habla que podría rondar los 170 mil millones de pesos.
El Tren Maya, de acuerdo a expertos, rondaría casi los 18 mil millones de pesos, y esta obra por lo menos es anacrónica, sobre todo en su concepto tradicional.
Y la refinería de Dos Bocas necesitará por ahí, alrededor de 170 mil millones de pesos.
Obvio las tres obras no quedarán listas para el próximo año, ni destinarán ese dineral de un solo golpe, pero lo que es verdad es que todos esos proyectos, a corto plazo, no se ven redituables para el país.

Los asegunes

En primer lugar, las aerolíneas comerciales están en crisis en este momento, y la gente viaja poco.

En segundo, Pemex es un agujero negro, año con año tiene millones en pérdidas, pero AMLO está empeñado en gastarse el dinero ahí.

Con el Tren Maya, que en teoría es el que gastaría menos, pues de momento no se ve para cuándo esto de la pandemia permita gozar una obra de esta naturaleza, aunado a los ambientalistas que están en contra del proyecto.

Tal vez, solo tal vez, no estaría mal que el Gobierno federal replanteara sus prioridades, el país está en franca crisis, y cada peso del erario debe ser cuidado y no malgastarse.

Estos tres megaproyectos son un volado, no se sabe si serán exitosos o no, el futuro luce muy gris mis señores, y peor si nos ponemos a gastar el poco dinero que entra a las arcas.