Nivelar la balanza

""

La captura de Dámaso López ha sido muy difundida por todos los medios del país.

Hemos sabido en estos días detalles sobre cómo se logró la captura, sus grados de responsabilidad en el narcotráfico, en la violencia y su pasado como funcionario público.

Pero hay dos cosas que preocupan a los sinaloenses y de las cuales no hablan las autoridades federales.

La primera es que, con la aprehensión de Dámaso López, la balanza se inclina a favor de los hijos de Joaquín “El Chapo” Guzmán.

Ya ayer, el titular de la Procuraduría General de la República, Raúl Cervantes Andrade, confirmó la pugna entre Iván Guzmán y hermanos con el hombre de Eldorado, por lo tanto, es fácil deducir que la captura juega a favor de los Guzmán.

Entonces, habría que preguntar al Gobierno federal si el siguiente paso será la detención de ellos. Máxime si el mismo Procurador también revela que está intacto el dinero de Guzmán Loera.

Lo segundo que preocupa a los sinaloenses es que el conflicto armado continuará probablemente en un tono de mayor violencia, dado que los protagonistas que quedan son jóvenes impulsivos, agresivos, prepotentes y que no respetan códigos que sus padres establecieron.

Demasiada testosterona combinada con armas, dinero, corrupción, drogas y alcohol.

El conflicto entre grupos del crimen organizado se ha convertido en guerra de “jóvenes” desde hace 10 años a la fecha. Basta ver las edades de las víctimas de homicidio y de detenidos por narcomenudeo, por ejemplo, para verificarlo.

Por eso urge que la Federación nivele la balanza lo más pronto posible, porque si no el resultado será, de nueva cuenta, dejar sola a la población en medio de una lucha armada sin escrúpulos.

 

Ni un dólar

Que uno de los personas más poderosas, incluido en la revista Forbes, detenido tres veces y fugado dos, y de una manera por demás peliculesca, convertido mediáticamente en una celebridad, y resulta que Joaquín GuzmánLoera le está ganando la apuesta al Gobierno de México como al de Estados Unidos: no le han podido sacar ni un dólar.

Así lo dijo en una entrevista mañanera el Procurador General de la República, Raúl Cervantes. 

Que hasta la fecha, el Gobierno de Estados Unidos no le ha encontrado un dólar al capo mexicano, y este Gobierno, el de aquí, le ha detectado poco, por lo que la conclusión es que no utiliza el sistema financiero.

Problema mayúsculo para los gobiernos si se van a ir por la ruta del dinero, cuando resulta que las rutas son subterráneas.

La cantidad de nombres que podrían destapar si consiguen destapar estas rutas.

Por lo pronto, corren las apuestas, ya hay quien dice que seguramente encontrarán entre los beneficiados a políticos de todos los niveles. 

 

‘Chamaquean’ 
a los productores 

No cabe duda que a río revuelto ganancia de pescadores, frase que le quedó al dedillo a Serapio Vargas, líder agrícola del valle de Culiacán y Navolato, así como a Alejandro Cervantes, líder de productores en Guasave. 

Y es que desde el martes estuvieron tratando de desactivar la manifestación y toma de casetas en el Estado, porque al parecer tenían un arreglo por debajo del agua con el Gobierno estatal.

Dicho objetivo no lo lograron, pero sin decir “agua va”, se fueron a la ciudad de México a escondidas de José Guadalupe Guillén Rentería, Ulises Gaxiola, Justo Puerta y de Eucadio Espinoza, lideres de la Cocyp, Mocyt y del CAM.

Los dejaron solos en las tomas de casetas y sin invitarlos se fueron la ciudad de México, donde se dice que se metieron a la fuerza al edificio de Aserca, porque no llevaban ninguna cita pactada y donde estuvieron hasta altas horas del día sin que los atendieran.

Cuentan que tanto Serapio Vargas como Alejandro Cervantes llevaban la encomienda de exponer sus demandas y adjudicarse el movimiento, y que era cuestión de llevar una respuesta para desactivar la toma de castas en todo el Estado.

Lo cierto es que el movimiento lo convocaron tanto Pepe Guillén, como Ulises Gaxiola y “El Cayo” Espinoza, y de haber tenido una reunión pactada hubiesen asistido también.

 

Fiscal, ¿autónomo?

El martes, el Fiscal General del Estado, Juan José Ríos Estavillo, no asistió a la Sesión del Sistema Estatal de Protección Integral de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, en el Salón Gobernadores, y la silla que se le asignó permaneció vacía durante el evento.

Más tarde, al concluir el acto, el Gobernador entró a la sala de juntas de su despacho y salió de ahí junto con el Fiscal, para atender a los medios de comunicación y conceder una brevísima entrevista de apenas ocho minutos.

Ríos Estavillo sentado junto a Quirino.

Y alguien le lanza la pregunta irónica: ¿y la autonomía?

Sí, otra vez.