El Centinela
13 mayo 2024

Los candidatos al Senado de la República por Morena, Enrique Inzunza Cázares e Imelda Castro Castro, estuvieron en un evento en Culiacán en donde supuestamente asistieron 2 mil personas.

El evento fue para socializar las gestiones de Morena en materia de salud. Y pues para hablar mal del PRI y del PAN, como se acostumbra hacer política en el País.

Resulta curioso que se quejen de “la vieja política”, pues ellos mismos están operando con viejas mañas esta campaña.

Por los grupos de WhatsApp de la Secretaría de Salud Sinaloa circuló el mensaje de que era obligatorio ir al encuentro.

Así que personas que no sabían de qué se trataba tuvieron que acudir. Según, la instrucción de obligar a los empleados de la Secretaría vino desde Cuitláhuac González Galindo y la gente cercana a él.

En su discurso están tan seguros de que van a ganar y tienen el respaldo ciudadano, entonces ¿por qué Imelda Castro y Enrique Inzunza necesitan estas prácticas baratas para hacer campaña? Muy en ello se dan baños de pureza criticando a los partidos de Oposición.

Y así lo han hecho al reunirse con diferentes estructuras, tanto municipales como estatales. Lo mismo ha aplicado con Juan de Dios Gámez Mendívil que mueve a los empleados del Ayuntamiento de Culiacán a su antojo.

Al más puro estilo del PRI y del PAN.

Es curioso que con cada proceso electoral, los candidatos prometan establecer los servicios básicos en los lugares más vulnerables de la ciudad.

También es curioso que año con año, las personas sigan diciendo que necesitan servicio de agua potable, pavimentación, alumbrado público, como si todos los días se formaran nuevas colonias, construyeran más casas y más población se mudara a Culiacán.

Cuando preguntas a la ciudadanía y te dicen lo mismo de siempre, como si les dieran un guión para responder lo mismo a las mismas preguntas.

La pavimentación es en Culiacán el tema primordial que la ciudadanía exige. Más que seguridad, más que programas para mejorar el municipio o la educación, poder caminar en concreto es su deseo y evitar el lodo en tiempo de lluvia y el polvo en todo el día.

Como si fuera un privilegio el que se viva en una zona pavimentada y no una obligación que tiene que acatar el Gobierno, sobre todo en polos o sectores que desde hace mucho fueron absorbidos por la urbe.

¿Por qué seguir prometiendo que ellos sí les harán el favor de realizar lo que por derecho le corresponde a la ciudadanía? Pareciera que tener una vida digna ya no es parte de algo fundamental, sino un beneficio adquirido a través de varios años, pidiéndolo.

Ahora el Ayuntamiento culichi cuenta con 34 licitaciones para pavimentar las calles en todo el municipio, pero sigue siendo poco, porque se sigue beneficiando sólo a unas cuantas personas.

Esperemos que algún día la población pueda sentir esa calidad de vida digna, con todos los servicios básicos, que no tengan que esperar a un proceso electoral para pedirle al candidato que pueda hacerles el favor o hacer una kilométrica cola.

Un avistamiento de aves desde el Jardín Botánico de Culiacán, guiado por un grupo de morras y morros biólogos de Culiacán, atrajo la atención de pocas personas, pero impactó de muy buena manera entre los miembros del grupo que acudieron.

Sin embargo, consideramos muy necesario señalar lo estricto que se ha convertido disfrutar el Jardín Botánico, pues los vigilantes constantemente observaban el paseo de los muchachos para cerciorarse que no sacaran cámaras para fotografiar a los pájaros que emigran desde distintas latitudes y que por suerte caen en la zona.

Y hay una explicación para ello, porque en realidad la orden de impedir que se saquen y usen cámaras fotográficas o de video es porque para eso tienes que pagar una módica cantidad extra.

Curioso que no exista una disposición de la misma institución y comunicación y gestión de los organizadores de un evento como este para llegar a un arreglo y hacer las excepciones pertinentes, por lo que vale el evento.

Pese a ese detalle, fue una buena experiencia, compartir y llevar la intención del día, que fue hacer conciencia ciudadana, acercarse a temas medioambientales y abrazar el conocimiento con público no necesariamente especializado en los rubros.

Es básico atraer la atención a lo que pasa en la naturaleza urbana y remarcar que ese día hubo intercambio de conocimiento pese a la actitud del personal.

Ese evento es un frente, aunque pequeño, que resiste al mundo atareado, imparable y cansado. Pero que sobrevive y que recobra relevancia aunque sea a nivel local.

-

Malecón es columna institucional de esta casa editorial.

malecon@noroeste.com