La 'enredada' coalición PAN-PAS

El Centinela
26 marzo 2018

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Vaya manera la que han establecido los integrantes de la coalición “Por Sinaloa Al Frente”, para presumir su “unidad”: con fotografías de sonrisas forzadas, abrazos de pose... y “boletinazos”.

Resulta que el sábado 24, de nueva cuenta, corrió como “reguero de pólvora” vía WhatsApp y redes sociales una supuesta ruptura entre el PAN y PAS.

¿Y quiénes cree usted que más “festejaron” esa especie? Adivinó: ¡los propios panistas!

Horas más tarde, los dirigentes del PAN, PAS, PRD y Movimiento Ciudadano salieron a desmentir el “run-run” con una imagen para mostrar que están “más unidos que nunca”.

La idea de ruptura es un “deseo” alimentado por los propios panistas “de a pie”, que a lo largo y ancho de Sinaloa están en contra de una coalición en lo local con el PAS. 

De su propia boca han advertido que votarán por Ricardo Anaya, pero no por Melesio Cuén.

Al PRD y a Movimiento Ciudadano no le hacen tanto “el feo”, pues éstos nomás “no pintan” en la entidad. 

Uno, el sol azteca, quedó desfondado en las últimas elecciones locales y sus principales cuadros ya emigraron a Morena, en tanto que Movimiento Ciudadano ni registro local alcanzó.

Tan enredados andan en el PAN que el dirigente Sebastián Zamudio tiene semanas cancelando la antes tradicional “conferencia de prensa de los lunes”. Tampoco contesta mensajes de WhatsApp ni llamadas telefónicas.

Conducta atípica de un líder partidista en la antesala del inicio de campañas, cuando lo que éstos buscan es posicionar discursos, mensajes, posturas, ideas y demás.

 

‘Prendida con alfileres’

Pero quien mejor definió lo complicado que ha sido, de nueva cuenta, concretar la coalición con el PAN (como ya ocurrió en el año 2016) fue el propio líder del PAS, Héctor Melesio Cuén Ojeda.

Ya semanas antes había esbozado la tentación de ir a una “coalición parcial”, no total. Luego, con boletines, PAN, PRD y PAS salieron a decir que siempre no, que sí iban juntos en todo.

Y apenas el miércoles 21, día del debate entre candidatos al Senado, Cuén declaró a un programa de Radio UAS que esa alianza estaba “prendida con alfileres”. Así como lo leyó usted.

Para justificar la inasistencia al espacio del periodista Víctor Torres, de Radio Fórmula, el ex rector de la UAS señaló que estaba en la Ciudad de México, “viendo” lo de la candidatura del distrito 05 federal de Culiacán.

La misma posición que debió haber quedado registrada ante el INE, días antes.

“Pero además”, confesó Cuén a Víctor Hugo Aguilar Gaxiola, de Radio UAS, “Traemos problemas serios; viene gente del PAN para salvaguardar más bien lo que es la coalición ‘Por Sinaloa al Frente’, donde todo ha estado hasta cierto punto en un momento dado ‘prendido con alfileres’, debido a que no hay acuerdos”.

Esta, pues, es la “realidad real” que priva al interior de la coalición panista-pasista, en boca de sus propios protagonistas. Sin quitarle ni ponerle.

 

Malova, el hijo arrepentido del PRI

Después de ocho años de no verse por el PRI públicamente, Mario López Valdez apareció en la toma de protesta de José Calzada Rovirosa como secretario general de Movimiento Territorial del tricolor.

Lo hizo en la antesala de las campañas electorales y ante la presencia del candidato del PRI a la Presidencia, José Antonio Meade.

Y según las crónicas, el abanderado priista a la silla del águila lo llamó “hijo pródigo”. Malova estuvo sentado en primera fila, a cuatro lugares de Meade.

A todas luces, se ve que el PRI con su viejo y pragmático oficio político electoral está recurriendo a todas las alianzas posibles para salir del sótano de las preferencias en el que se encuentra.

Malova abandonó el PRI para competir por la alianza opositora en 2010 con la que ganó la Gubernatura en contra de Jesús Vizcarra Calderón.

Aunque hubo algunas expresiones priistas que lo tildaron de traidor, lo cierto es que Malova gobernó con el peor estilo del PRI: robo, abuso de poder y crímenes de impacto aún no aclarados fueron su marca.

Luego de su sexenio pasó 2017 en el exilio político apestado por las acusaciones de corrupción en contra de colaboradores suyo que incluso, ya algunos están bajo proceso.

Y se sabe que Quirino Ordaz Coppel no le respondía las llamadas.

¿Por qué entonces hoy lo arropa el propio Meade?

 

El hijo pródigo

La parábola cristiana del hijo pródigo se refiere al vástago de un hombre que abandonó su hogar y dilapidó su herencia en excesos. Ya sin dinero, regresó arrepentido con su padre, quien lo recibió sin cuestionamientos.

Por eso vale decir que José Antonio Meade le dijo a Mario López Valdez: aunque hayas abandonado al PRI y hayas saqueado las finanzas públicas para dilapidarlas en tus excesos, te recibo para que sumes lo que puedas y así salir del sótano.

Meade demuestra su desesperación y Malova su cinismo.