Jamás de los jamases

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Ante señalamientos de que existe un pacto entre el Gobernador Quirino Ordaz Coppel y su antecesor, Mario López Valdez, después de que los diputados en aplanadora priista dieron luz verde a las cuentas públicas de éste, el Mandatario estatal rechazó cualquier pacto o negociación y negó ser cómplice de las corruptelas que se le atribuyen a la administración anterior.

El Gobernador enfatizó que fue contundente el informe que presentó la Secretaría de Transparencia, donde se hizo el análisis, la revisión de diferentes dependencias y aseguró que nada tienen que ver con las que están en la cuenta pública.

Dijo que  en su Gobierno están procediendo a hacer las notificaciones a los distintos funcionarios implicados en el presunto mal uso de recursos públicos. 

Y con resultados en manos dice que se procederá a interponer las denuncias correspondientes para todo aquel funcionario que no logre aclarar el uso y destino de los recursos públicos.

El Gobernador aseguró que se continúan haciendo revisiones a áreas que no se habían hecho.

Será el sereno pero después de que se reveló la reunión que previamente había tenido con los priistas, es imposible que no se haya considerado la impunidad en la que queda no sólo la administración de Mario López Valdez, sino de todas las alcaldías.

 

El ‘costo’ 
del progreso

Bendita justificación la que lanzó la priista Irma Tirado Sandoval al justificar las razones por la que se avaló las cuentas públicas, al decir que el PRI está trabajando para que Sinaloa tenga cabida en el progreso.

Dijo que se actuó con la mayor responsabilidad para garantizar la viabilidad financiera del Gobierno estatal, los municipios y los entes públicos.

Añadió en defensa del aval a las cuentas que hay municipios que en caso de que hubieran suspendido sus cuentas no iban a tener oportunidad de tener recursos, y entes públicos que estarían en el mismo sentido.

O sea, la impunidad es el costo de que los municipios tengan viabilidad financiera y que alcancen el progreso, según los priistas.

Con ese pensamiento, muy rancio por cierto, olvidémonos de castigos, serán sólo señalamientos pero al fin de cuentas avalarán cualquier cosas en pos del progreso.

Con esta clase política, ¿hasta cuándo tendremos una verdadera rendición de cuentas?

Si eso hacen a la vista de todo mundo, ya nos imaginamos lo que harán con las cuentas en “lo oscurito”, a muchos no les gusta eso de lo “oscurito”, pero la verdadera oscuridad está en la manera en la que se llevan la riendas de este estado, y las riendas de este Congreso.

 

Estrategia fallida

Ayer amanecimos con la noticia de que a pesar de la vigilancia militar, Sinaloa ya superó la barrera anual de los mil asesinatos en menos de siete meses con un promedio de 5 muertos por día.

De acuerdo con datos de la Fiscalía General del Estado y registros hemerográficos, hasta el domingo se contabilizaron mil 32 homicidios.

Peor, de continuar esa tendencia, en los próximos 26 días se superará el registro de asesinatos de todo 2016, cuando ocurrieron mil 162 muertes violentas.

Y es no sólo de Sinaloa, sino que la cosa está que arde en todo el País, según estadísticas del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública establecen que hasta junio, el mes más violento de la historia en México, solo Guerrero, con mil 161 casos, y el Estado de México, con mil 26 casos, habían superado los mil asesinatos.

Debajo de esas entidades se colocaron a Baja California y Sinaloa, las cuales este mes ya superaron también los mil asesinatos.

Recordemos que la estrategia del Gobierno fue incrementar el estado de fuerza, con el envío de 2 mil 200 elementos militares para patrullar en conjunto con las policías municipales y la Policía Estatal Preventiva.

Y a estos muertos ya en cifras súmele la cifra de desaparecidos.

Sinaloa es un cementerio... y los muertos quedan sólo en cifras, sin rostro, sin familias, parecen seres enterrados en un sueño... 

Sí, una pesadilla llamada impunidad.

¿Que al tiempo se verán resultados? No los vemos, pasan los días y más y más muertos.

No sé si el Gobernador puede planchar almohada a gusto por las noches, porque los sinaloenses no.

 

Impunidad 
sin fin

El sindicato de trabajadores del Ayuntamiento mazatleco salió “observado” de nueva cuenta, ahora en la administración del priista Fernando Pucheta, como ya se lo había observado a Carlos Felton, en 2016. 

Los señalamientos, principalmente, pagar los sueldos por las comisiones que ostentan los dirigentes sindicales. 

O sea, a parte del salario que devengan en la Comuna, les pagan por la labor sindical. 

Esta práctica ya ha sido detectada en otras comunas del estado, pero como no pasa nada, no hay acción administrativa, menos penal para los que violan la ley, la reincidencia se vuelve una práctica cotidiana.