Fiesta sin fiesta
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La máxima fiesta mexicana, el “Día del Grito” será una fiesta sin fiesta.
Este año, la pandemia ha acabado con muchas de las tradiciones mexicanas, o por lo menos las ha puesto en cuarentena, y algunas de ellas son nuestras fiestas, siempre dadas a las aglomeraciones.
El Día del Grito se celebrará en Sinaloa sin música, ni grandes espectáculos de pirotecnia, acaso una transmisión en redes o por radio y televisión, con los mandatarios recordando a los héroes que nos dieron patria.
El Palacio de Gobierno en Culiacán será la única sede donde podrá asistir un puñado de ciudadanos a acompañar al Gobernador, Quirino Ordaz Coppel, mientras en las alcaldías la fiesta se reducirá a una transmisión a través de las redes.
No hay una orden ni un formato para la celebración en las alcaldías, así que cada Cabildo decidirá el formato de la celebración.
Algunos de los alcaldes ya anunciaron una fiesta limitada, pero estaremos atentos, a ver si no sale alguno del huacal y termina rompiendo los protocolos sanitarios.
El único lado positivo de las fiestas sin fiesta del mes patrio consiste en el ahorro que significará la cancelación de los grandes eventos.
Vienen tiempos duros
Las declaraciones del Gobernador Quirino Ordaz Coppel sobre las reducciones a los presupuestos estatales para el próximo año son una alerta de que vienen tiempos muy difíciles para Sinaloa.
A unos meses de que termine el 2020, la pandemia continúa haciendo estragos, no hay vacuna en el horizonte inmediato, los precios del petróleo sufren y la estrategia económica del Gobierno federal no augura nada nuevo.
Las malas noticias son para todo el País, no solo para Sinaloa, pero si revisamos la situación de varios sectores primordiales de la economía sinaloense, las cosas se ponen cuesta arriba.
Para empezar, los productores de maíz y de trigo siguen sin cobrar los apoyos de Gobierno, por más promesas que les han hecho. El sector turístico tuvo una bocanada de oxígeno con el verano, pero no será suficiente para enfrentar septiembre, octubre y noviembre, tres meses difíciles.
Y del sector pesquero no hablamos, ahí la ruina es total. El furtivismo es tan descarado que cuando comience la zafra camaronera los pescadores van a regresar con las redes vacías.
Viene un 2021 difícil, lo mejor es prepararnos.
Mal de muchos...
Son casi 71 mil muertos y 668 mil 381 casos confirmados es lo que ha dejado el Covid-19, y al paso que vamos serán muchos más de 100 mil los muertos.
Y si esto no es una catástrofe pues ya no sabemos qué es lo que considera pandemia el Presidente Andrés Manuel López Obrador.
Según el Mandatario, el Covid-19 nos está tratando mejor, ya que países con mayor potencial económico e infraestructura médica están siendo más afectados.
De acuerdo al Inegi, el Covid-19 es ya la cuarta causa de muertes en México, imagínese, la cuarta y todavía dice el Presidente que nos está tratando mejor y que cuando termine la pandemia se hará una evaluación de a ver cómo les tocó a cada país.
Pero según él, el “éxito” de México ante la pandemia es por la participación de la gente, el sacrificio y la obediencia del pueblo.
De plano hay declaraciones que sacan coraje, cuando la muerte está por todas partes, amigos, compañeros, familiares, conocidos, se han ido y todos sin siquiera tuvieron una despedida digna.
Que hay Cuén para rato
Héctor Melesio Cuén Ojeda, líder del PAS, aprovechó un poco de su tiempo libre para platicar con los militantes del partido sobre temas de actualidad y para informar que se encuentra bien de salud.
El ex Rector de la UAS dijo que se echó una vueltecita a la Ciudad de México para realizarse unas pruebas médicas, luego de que el año pasado tuviera algunos problemas serios de salud.
El maestro comentó que está bien, y que hay Cuén para rato, y hay muchísimo trabajo qué hacer dentro del PAS.
El líder (propietario) del PAS compartió una serie de opiniones sobre el Covid-19, más de una hora platicó sobre la actualidad de la pandemia y cómo México no ha actuado de la mejor manera durante la contingencia, y se subió al barquito de quienes critican el trabajo de Hugo López Gatell.
Cuén Ojeda aprovechó para criticar al Gobernador Quirino Ordaz Coppel, ya que no comparte la idea de que se haga una ceremonia del Grito de Independencia, y además bromeó sobre que pareciera que quisieran llevar a los “viejitos” a la cámara de gases, ya que este tipo de eventos masivos solo invitan a más contagios y muertes en Sinaloa.
Sumido en serios problemas de salud, Cuén Ojeda es el vivo retrato de los líderes de partidos políticos que ligan el destino de sus organizaciones políticas con su vida.
Habrá que ver hasta dónde llega el PAS cuando Cuén Ojeda ya no pueda dirigirlo.
Vargas y su clavo ardiendo
Este Centinela se acaba de enterar de la gasolina que mantiene andando la maquinita de los deseos políticos de Gerardo Vargas Landeros, el político más “salado” y terco de Sinaloa.
Ya se acabó los partidos políticos, se le acabaron los apoyos y los padrinos, se le acabó el fuelle que le dio la administración del ex Gobernador Mario López Valdez, pero él sigue insistiendo, quiere ser Gobernador a costa de lo que sea.
Llama la atención que su última ocurrencia fue andar diciendo que le gustaría competir en las filas de Morena, una osadía que a algunos les causa risa, pero que está lejos de ser todo, menos una broma.
Resulta que Vargas Landeros mantiene una excelente relación con Julio Scherer, Consejero Jurídico de la Presidencia, y él personaje que lo ha animado a que se aviente al ruedo con el apoyo de Morena.
Envalentonado, Vargas Landeros llega a Sinaloa y presume de morenista, pero aquí se topa con químicos y rochamoyistas, y lo mandan por un tubo.
La cosa es que Vargas Landeros no es un tipo fácil de sacar del ruedo, no sabemos qué brujo le leyó las cartas o qué sueño tuvo que está convencido de que es el mesías que transformará a Sinaloa en un paraíso.
El asunto es que se agarra de cualquier clavo, aunque esté ardiendo.