Visita de altura
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La visita del Embajador de Estados Unidos en México a Mazatlán sorprendió, debido a que no fue anunciada y se realizó en poco más de tres horas.
Christopher Landau respondió así a una invitación que le había hecho el Gobernador Quirino Ordaz Coppel en la Ciudad de México.
La visita podría parecer intrascendente, debido a su rapidez, pero en realidad es un gesto de confianza del Gobierno norteamericano a Sinaloa, una zona históricamente marcada en color rojo por nuestros vecinos, sobre todo los que se encuentran al mando.
El diplomático cumplió así con la invitación de Ordaz Coppel, pero además completó su sueño de recorrer todos los estados mientras se encontraba representando al país de las barras y las estrellas en México.
Landau rompió con todos los canones de los embajadores estadounidenses en México y se convirtió en un verdadero testigo de su tiempo, solo le faltaba conocer Sinaloa y Colima para haber visitado todos nuestros estados.
Y después de visitar Mazatlán despegó rumbo al estado colimense y así cumplir con su compromiso personal.
Además mostró siempre su cariño y respeto por México, aprendiendo el idioma de una manera sorprendente y disfrutando de nuestra gastronomía como si fuera su preferida.
Compromiso
Está demás decir que la visita de un Embajador estadounidense a Sinaloa no se puede andar anunciando, simplemente por motivos de seguridad. Un diplomático estadounidense solo por la razón de serlo se convierte en blanco de preocupación internacional.
Sin embargo, una vez que llegó a Mazatlán, Christopher Landau se comportó como un turista más, como miles de sus compatriotas que visitan las playas del puerto y otros tantos que se quedan a vivir para siempre en las costas mexicanas.
En cuanto pudo se bajó de la camioneta que lo trasladaba y se puso a tomar fotos que subió a sus redes sociales, resulta que es un fanático de andar tuiteando.
Y ya en serio, se comprometió en promover a Sinaloa en su País y propuso que aprovechemos el T-MEC para Sinaloa salga beneficiado con el tratado comercial.
Landau dejará historia como Embajador en México y aunque a muchos les gustaría que siguiera en el País, su llegada con la administración de Donald Trump lo condena.
Dentro de poco se verá obligado a presentar su renuncia y será el Gobierno de Joe Biden el que decida si debe de seguir en México o cambiar de aires.
¿Y la justicia?
Solo en este año, la Comisión Estatal de Derechos Humanos ha detectado dos casos de personas que entraron a alguna celda de barandilla y luego fueron hallados sin vida.
Difícil sin duda para la familia, pero de inmediato fueron a interponer las denuncias ante este organismo, que al final lo investigó y lo validó.
Los casos ocurrieron en Mochicahui, sindicatura de El Fuerte, y en Los Mochis.
En ambas ocasiones fueron los mismos padres de las víctimas que llamaron a la policía para que sus hijos fueran detenidos por estar bajo la influencia de alcohol y narcóticos, porque creyeron que eso los ayudaría a mantenerlos a salvo.
Es increíble que viviendo en este tiempo no sean casos que la Fiscalía investigue y que se detenga y castigue, por acción u omisión, a los responsables.
Sabemos que son temas delicados, por estar relacionados con las fuerzas del orden, y por eso es que esperamos que, por lo menos, las autoridades escuchen a la dependencia responsable de proteger los derechos de los familiares y lleven las investigaciones hasta su última consecuencia.
Les gustó el poder
Los alcaldes de Morena en Sinaloa o tienen muy mala memoria o de plano creen que estamos tarugos.
El Alcalde de Culiacán, Jesús Estrada Ferreiro, había prometido en campaña no ir por la reelección, pero ya se le olvidó o de plano su memoria es más mala de lo que pensábamos.
Ahora resulta que si Morena Nacional lo pide, él buscará volver a ser el Presidente municipal de la capital sinaloense.
Si bien es cierto, no sería el primer político que encampañado prometa cosas que no tiene pensado cumplir, pero Estrada Ferreiro nos ha demostrado que él se coce aparte y que hablar antes de pensar siempre ha sido su debilidad.
Está igual que el Alcalde de Mazatlán, Luis Guillermo “El Químico” Benítez, que dice una cosa y termina diciendo otra.
Y todavía falta ver si Morena, su partido, los está considerando para la reelección, pero ellos ya andan de aprontados, levantando la mano.
Los dos se sacaron la alcaldía en una rifa y la verdad es que nunca han estado a la altura del puesto, pero son muy buenos para escuchar los aplausos de sus seguidores y muy malos para aceptar las críticas de sus contrarios.
Reprimenda
Quien puso el dedo en la llaga de lo que veremos en esta lluvia de estrellas que estarán los partidos políticos impulsando fue Ernesto Hernández Norzagaray.
El politólogo señaló que el reto para los partidos en las campañas que vienen es buscar candidatos nuevos, nada de reciclajes ni que tengan una labor “cuestionable como servidores públicos”.
También propuso a los institutos de siempre que no anden candidateando a esos personajes que vienen de derrotas electorales, sino que haya gente de liderazgo.
Y que tampoco salgan con eso de que “yo soy el fundador del partido”.
El caso es que el politólogo se la puso muy difícil a los partidos, porque si de algo viven esos señores es del reciclaje, tienen décadas ordeñando a la misma ubre y se ve muy difícil que acepten dejar de chupar del presupuesto.
Llegó el día
Después de meses de su nombramiento, ayer Tatiana Clouthier asumió como titular de la Secretaría de Economía.
El reto no es sencillo, pero tiene la ventaja de que cualquier cosa buena que haga en el puesto se va a notar, porque la economía está que arde, la pandemia la tienen casi noqueada.
Desde esta columna le deseamos suerte a la sinaloense porque si le va bien a ella nos irá bien a todos los mexicanos.