Poderes fácticos
Los boletines oficiales de las autoridades encargadas de combatir la producción, acopio y tráfico de sustancias ilícitas dan cuenta de cifras, operativos, detenciones y aseguramientos en las diferentes acciones que realizan en todo el territorio nacional.
Ayer, la Secretaría de Marina Armada de México y la Fiscalía General de la República decomisaron casi 4 toneladas de metanfetaminas en un laboratorio clandestino, siendo el segundo más grande en lo que va del sexenio.
Grandes, chicos, medianos, los laboratorios clandestinos y las cifras de materiales sintéticos asegurados, vehículos y personas detenidas no dicen nada a un público ya acostumbrado a ver normales las actividades ilícitas de los grupos del crimen organizado.
A propósito de esa visión normalizadora de las actividades ilegales, el sábado, el presidente de la Asociación Mexicana de Abogados, Ricardo Beltrán Verduzco manifestó que los poderes fácticos en el país tienen prácticamente contra la pared a los ciudadanos en materia de seguridad, la autoridad está prácticamente cogobernando con ellos y eso es lo más delicado lo que está sucediendo con esa situación.
Por ello dijo que se le ha hecho un llamado a que la autoridad estatal atienda, a que no diga nada más que están esperando al Ejército Mexicano, la Guardia Nacional y la Marina y sugirió que deben fortalecerse las policías locales porque en Sinaloa el clima a veces pacífico que hay no se debe a las acciones del gobierno, se debe al relajamiento de los poderes fácticos.
Una situación evidente para cualquier ciudadano pero que casi nadie se atreve a visibilizar.
Los boletines oficiales terminan diciendo que los operativos para combatir las conductas delictivas, traducidas tanto en el establecimiento de laboratorios clandestinos, como en la elaboración de drogas sintéticas en el País, debilitan la producción y distribución de drogas por parte de grupos delictivos.
Un teatro de sombras en que muchos ciudadanos participan con su aceptación a las manifestaciones que elogian a los delincuentes, conviene establecer de qué lado se está.