La maquinaria comienza a moverse

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Editorial

Aunque Morena se ha negado a abrirse a nuevos miembros, sus aspirantes a competir en los próximos procesos electorales permanecen callados y ni siquiera hay una política a seguir para competir electoralmente en el futuro, los tiempos comienzan a mover la maquinaria de Morena.

El partido político de Morena prácticamente no existe, el partido sigue siendo Andrés Manuel López Obrador, con sin etiqueta de Presidente, cualquier aspiración se realiza de manera directa, pocos, o nadie, se atreve a mencionar que luchará por algún puesto.
La clásica frase de los posibles contendientes es la misma: “Apoyaremos a los que el partido designe”.
A pesar de que los morenistas les moleste hasta el tuétano hemos regresado a los tiempos del viejo régimen del PRI, cuya regla de oro “el que se mueve no sale en la foto”, se ha vuelto más vigente que nunca.
Sin embargo los tiempos políticos fueron capaces de derrumbar hasta el muro de Berlín, y los primeros que comienzan a moverse son los diputados federales, acuciados por los tiempos electorales para los que tienen que estar preparados.
Resulta que los diputados morenistas quieren reelegirse, les gustó el “tsunami” que los llevó hasta San Lázaro y quieren seguir montados en la ola, así que se alistan para cambiar las reglas y tener la posibilidad de reelegirse.
Hay más de 30 legisladores morenistas a los que les gustaría permanecer en el poder. Tampoco falta mucho para que los alcaldes de Morena comiencen a declarar sus intenciones.
Sin embargo, los aspirantes a gobernadores son los que mantienen el silencio, son puestos tan cercanos al Presidente que saben que cualquier movimiento en falso podría hacerlos perder el pie, así que seguramente seguiremos escuchando silencio.
Entre más se acerquen las fechas veremos los movimientos, primero serán “destapes” indirectos, después habrá quien diga “yo” y finalmente veremos las peleas intestinas por los puestos, lo mismo de siempre.