Imprudencias mortales

Editorial
22 julio 2024

Gracias a las redes sociales, al acceso a cámaras de videovigilancia y al hecho de que cada vez es más común que ocurran, muchos hemos visto con terror las imágenes de accidentes que terminan con la vida de personas que tuvieron la mala suerte de estar ahí.

No siempre el alcohol es el factor determinante, pues también hay acciones imprudentes a la hora de conducir un vehículo.

Hay un fenómeno que sirve para explicar, definitivamente lo que pasa con los automóviles, y es la propagación de las motocicletas en zonas urbanas y rurales con niños o menores de edad conduciéndolas.

Es un hecho también que muchos hemos sido testigos de su actuar inmaduro a la hora de conducirlas.

Ahora tenemos a diario noticias de accidentes relacionados con motocicletas y menores de edad con resultados funestos.

Es obvio que muchos de los que se trepan a este tipo de vehículos no tienen la conciencia suficiente para conducir de manera correcta.

Vaya, ni siquiera son capaces de entender la importancia del uso del casco.

Algo parecido ocurre con muchos jóvenes, hombres y mujeres, que conducen vehículos sin tener la capacitación y la madurez mínima para este.

Lo peor es que, como en todo México, es muy fácil obtener una licencia de conducir porque los padres de alguien tienen algún camarada que hará el paro para evitar el examen de manejo y obtener una licencia, total, manejar es lo más fácil del mundo.

Muertes como la de don José María, de 78 años en la colonia Lombardo Toledano, son tan absurdas como el hecho de permitirnos que haya personas sin la más mínima noción de conducir manipulando lo que todos sabemos que es una arma mortal: un automóvil.